T`ung Jen / Comunidad con los Hombres
Dictamen
Comunidad con los hombres en lo libre: éxito. Es propicio atravesar las grandes aguas. Propicia es la perseverancia del noble.
Imagen
Cielo junto con fuego: la imagen de la Comunidad con los Hombres. Así estructura el noble las tribus y discrimina las cosas.
Si en el hexagrama 11 se animaba a generar beneficios para todos sin excepción, en este hexagrama se anima a la persona a empezar a generar beneficios en los grupos/tribus en los que se desenvuelve. Por otro lado, este hexagrama también incita a que la persona establezca un círculo de amistades que le sirvan de apoyo en su camino del desarrollo personal emprendido.
Wilhelm (1997) alude a que la idea de comunidad de este hexagrama nace del símbolo de un fuego que llamea hacia arriba, hacia el Cielo. Este hexagrama muestra cuál es el camino para establecer una unión pacífica y duradera entre las personas: constituirse bajo las bases de unos valores universales apropiados para la humanidad más allá de los intereses particulares del ego. Además, advierte que cuando se consigue esto se puede emprender incluso lo más difícil: atravesar las grandes aguas.
En sus trigramas se muestra la actitud que se debe adoptar para conseguir esta comunidad armónica entre las personas: perseverar con gran energía (dos veces el trigrama del Cielo) en aclarar al máximo todas las situaciones de desequilibrio que surgen en los grupos (trigrama del Fuego) y profundizar hasta la esencia de los problemas para poner las soluciones necesarias (trigrama del Viento).
Una comunidad necesita un líder que: 1) luche con todas sus energías por unas metas claras, objetivas, elevadas y motivantes; y 2) tenga la capacidad para ordenar los roles dentro del grupo evitando que sólo haya una mezcla de individuos.
LÍNEAS
Las líneas de este hexagrama abordan las distintas situaciones que surgen de manera natural cuando se producen agrupaciones entre personas: el separatismo, el sectarismo, la oposición, las maquinaciones, etc., y también muestra perfiles de grupos con los que se podrá conseguir algo o no. La persona elevada tiene que clarificar y profundizar en todas las situaciones para no ser presa de “reacción” ante ellas y seguir unido a los dictados elevados del destino. Aquellas personas que están destinadas a estar unidas serán capaces de superar todos los obstáculos.
1ª Línea Comunidad con hombres en el portal. Ningún defecto.
En el comienzo de crear una comunidad de apoyo es importante detectar si el grupo está libre de aspiraciones egoístas o particulares. Si ya se empiezan a crear separatismos o eventuales convenios secretos desde un principio esto acarreará desventura. Los cimientos de toda unión debe basarse en ideales elevados y convincentes que engloben a todos por igual. En caso de que se detecten aquí ya desviaciones egoístas, aunque parezcan leves, hay que intervenir porque lo que ahora parece poca cosa en el tiempo será un gran problema. El sabio actúa en el comienzo de las cosas.
2ª Línea Comunidad con hombres en el clan: humillación.
En este caso el sabio encuentra que en la comunidad aparecen las actitudes separatistas basadas en intereses egoístas que no aceptan ni integran a todos. La persona sabia se apoya aquí en las personas de mayor confianza para evitar esto porque este tipo de actitudes no serán buenas y conllevarán desventura y humillación.
3ª Línea Esconde armas en el matorral, sube a la alta colina que está delante. Durante tres años no se levanta.
En esta línea el sabio encuentra que en el grupo reina la desconfianza y el recelo, pero no cae en el error de intentar hacer “emboscadas secretas” a los elementos desestabilizadores para ganarles por sorpresa porque esto no haría más que aumentar los recelos y la desconfianza impidiendo aún más la convivencia dentro del grupo. Tener “segundas intenciones” o “maquinar” no es bueno porque en verdad el grupo no le pertenece. Lo que prima no son las personas sino el destino. Lo único que hay que hacer es mantenerse fiel a la aceptación de todos.
4ª Línea El sube a su muralla, no puede atacar. ¡Ventura!
Aquí el sabio es consciente de que no debe caer en posiciones enfrentadas por la envidia o el orgullo porque sabe que sólo refuerzan las actitudes separadoras que impiden la reconciliación en la desavenencia. Al final hay que aprender a tolerar porque todo el mundo tendrá su papel en el grupo y por eso fue elegida por el destino para estar en él. No gasta fuerzas en vano.
5ª Línea Los hombres en comunidad primero lloran y se lamentan, pero luego ríen. Después de grandes luchas logran encontrarse.
Ahora el sabio observa que aunque el grupo está en una fase en dónde se producen tensiones y discordancias dentro del mismo que siguen llevando al distanciamiento entre sus integrantes son capaces de superarlas y lograr una unión duradera. Las personas que están destinadas a unirse son más fuertes que los obstáculos que les aparecen porque están unidos en sus corazones y movidos por ideales nobles.
6ª Línea Comunidad de los hombres en la pradera: no hay arrepentimiento.
La comunidad ha evolucionado a una relación de armonía pero sin lazos profundos de unión ni una misión importante o elevada. La comunidad simplemente convive junta exteriormente. La persona sabia está más allá de este tipo de comunidad pero se adhiere a ella con modestia porque así lo ha dado el destino. No hay nada que reprochar. Se uno a otros sin objetivos particulares.
Referencias Bibliográficas
Vila, J. y Galvany, A. (Traduc.) (2012). Yijing. El Libro de los Cambios. Con el comentario de Wang Bi. Gerona: Atalanta.
Wilhelm, R. (1997). I Ching. El Libro de las Mutaciones. Barcelona: Edhasa.
About Pedro Jesús Jiménez Martín
Profesor Titular de Universidad. Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF). Universidad Politécnica de Madrid. Director del Proyecto de Investigación Cultura Física Oriental.