Archivo por meses: diciembre 2022

Hexagrama 8

Pi / La Solidaridad (Mantenerse unido)

Dictamen

La solidaridad trae ventura. Indaga el oráculo una vez más, ve si tienes elevación, duración y perseverancia; si es así no habrá defecto. Los inseguros se allegan poco a poco. El que llega tarde tiene desventura.

Imagen

Sobre la tierra hay agua: la imagen de la solidaridad. Así los reyes de tiempos antiguos otorgaban en feudo los diferentes Estados y mantenían trato amistoso con los príncipes vasallos.

Wilhelm (1997) alude al símbolo de los ríos que van fluyendo por la Tierra hasta confluir todos en el mar para mostrar que significa este dictado de la solidaridad y sus leyes. Todos los ríos descienden por sí solos hacia el mar rellenando los huecos que encuentran porque todos siguen las mismas leyes. Un grupo es duradero cuando todos se mantienen unidos de manera natural porque comparten los mismos intereses elevados.

El hexagrama habla de unirse con personas afines para tener un grupo a fin de complementarse y estimularse mutuamente mediante una solidaria adhesión. Pero una unión que tiene por centro a un líder capaz y noble en torno al cual congregarse. Este líder asume una gran responsabilidad al ocupar es posición y para asumirlo debe tener a nivel interno la grandeza, rectitud, consecuencia y vigor suficiente para poder estar a la altura de la situación. De no ser así ocasionará mayor confusión que si no hubiera tenido lugar unión alguna.

En el hexagrama todas las líneas son yin excepto la quinta del soberano. La gente se solidariza al recibir el influjo de la voluntad firme que emana del puesto conductor, que para ellos, es el centro de unión. Pero a la vez el soberano se solidariza con estas personas en las que encuentra un complemento necesario a su propia naturaleza.

El problema en esta unión son los inseguros e indecisos sobre si unirse o no al grupo. Gente que vacila si implicarse de verdad o no. Aquellos que tardan en unirse al grupo ya no vivencian con él el 100% de sus experiencias y con ello sólo consiguen que el grupo los aparte y les cierre las puertas. En caso de duda es mejor esperar al momento oportuno para encontrar el grupo con el que hay que solidarizarse.

La actitud constructiva que se debe adoptar para unirse a un grupo corresponde a los trigramas que componen este hexagrama. Mucha escucha y flexibilidad para seguir a los demás y al líder (trigrama del agua como trigrama inferior y nuclear), atención al peligro de los pequeños egos que al final van minando al grupo (trigrama del agua), y estabilidad, calma y fidelidad al grupo (trigrama nuclear de la montaña).

LÍNEAS

Las líneas de este hexagrama aluden a tres aspectos esenciales: qué tipo de grupo es al que merece la pena unirse y solidarizarse en busca de tus objetivos; como apoyar al líder de ese grupo cuando es el adecuado para que la unión sea duradera y cuándo es mejor esperara a encontrar un nuevo grupo si no es el adecuado.

1ª Línea Mantente solidario con él, de verdad y lealmente: no será una falla. Verdad como una colmada vasija de barro. Así por fin desde afuera llegará la ventura.

La base para entablar cualquier relación o amistad es la veracidad y la sinceridad. La amistad conseguida con bonitas palabras no tiene futuro, sólo a través del poder de la fuerza interior se atrae hacia sí la ventura que procede del exterior.

2ª Línea Mantente solidario con él en tu fuero interno. La perseverancia trae ventura.

La relación con el líder debe basarse en lo recto y la perseverancia ya que el trabajo viene del interior, esta es la manera para no perderse uno mismo. El que busca solidaridad con el objeto de trepar, no sigue el sendero noble que salvaguarda su dignidad y se desperdicia a sí mismo.

3ª Línea Te solidarizas con la gente que no es la que debe ser.

Esta línea advierte de estar atentos a que las personas con las que nos unimos compartan los mismos intereses e ideales con uno. No es bueno dejarse arrastrar a una falsa familiaridad. Con estas personas hay que mantener camaradería sin intimidad, y así uno mantiene la puerta abierta para juntarse cuando lo encuentre con los que son sus afines.

4ª Línea También en lo externo mantente solidario con él. La perseverancia trae ventura.

El grupo se ha establecido en torno a un líder apropiado. Entonces puede y debe uno manifestar su adhesión a él abiertamente. Sólo es necesario permanecer firme y no permitir que nada nos confunda y nos induzca a error.

5ª Línea Manifestación de la solidaridad. El rey, durante la cacería, sólo permite la batida desde tres lados, y renuncia a los venados que se desvían adelante. Los ciudadanos no requieren advertencia. ¡Ventura!

En la antigüedad el rey no abatía injustamente piezas en la caza, siempre dejaba una oportunidad para que estas pudiesen escapar de modo que sólo daba muerte a las que se le “ofrecían voluntariamente”. El liderazgo aquí es el de una persona que atrae poderosamente a los demás pero él no ha rogado ni adulado a nadie para conseguirlo, todos acuden por sí mismos. Es una unión poderosa entre personas que desean hacer una causa común con él. Nadie se ha visto forzado a la unión y así todos muestran abiertamente lo que piensan y sienten. Cuando alguien desarrolla dentro de sí la pureza y el vigor necesarios para ser centro de la unión, los hombres que le están predestinados llegan por sí mismos. En caso de que una persona no se vea en el grupo no hay que forzarla, debe encontrar el grupo y el líder que está buscando.

6ª Línea No encuentra cabeza para la solidaridad. Desventura.

Se ha perdido la ocasión de unirse a un grupo porque se vacila y hay miedo a una entrega plena y verdadera ya que no se ve claro si seguir a ese líder. Es mala decisión si el líder era el adecuado por los principios nobles que persigue. Por otro lado, el mensaje es que si se descubre que el líder no es la persona adecuada es mejor abandonar el grupo y esperar a que aparezca el predestinado.

Referencias Bibliográficas

Vila, J. y Galvany, A. (Traduc.) (2012). Yijing. El Libro de los Cambios. Con el comentario de Wang Bi. Gerona: Atalanta.

Wilhelm, R. (1997). I Ching. El Libro de las Mutaciones. Barcelona: Edhasa.

About Pedro Jesús Jiménez Martín

Profesor Titular de Universidad. Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF). Universidad Politécnica de Madrid. Director del Proyecto de Investigación Cultura Física Oriental.

Hexagrama 7

Shih / El Ejército

Dictamen

El ejército requiere perseverancia y un hombre fuerte. Ventura sin falla.

Imagen

En medio de la tierra hay agua: la imagen del ejército. Así el noble, en virtud de su magnanimidad para con el pueblo acrecienta sus multitudes.

Wilhelm (1997) asocia a este hexagrama con el símbolo del agua subterránea que va reuniéndose en el interior de la tierra formando un lago, y por analogía lo asocia con la explicación de cómo podemos reunir a los hombres para crear un ejército que pueda enfrentarse con éxito a la guerra. Wang Bi también alude a que este hexagrama no se refiere a un ejército ya constituido sino al reclutamiento de personas durante una campaña militar concreta.

La clave del contenido de este hexagrama para Wilhelm (1997) está así en su 2ª línea y no la 5ª del emperador, ya que es la que destaca la importancia de la figura del general que mantiene al ejército en obediencia gracias a su capacidad liderazgo. Para Wilhelm la clave de este liderazgo depende de tres ingredientes:

1.- Asumir una actitud de máxima atención frente a lo que se salga de lo justo y lo recto en los objetivos y actuaciones como si se estuviese frente a un gran abismo. El peligro de los abusos de poder, de romper la disciplina y saltarse las normas.

2.- Mostrar la justicia, la rectitud y los principios elevados de la empresa para despertar entusiasmo, ganar los corazones, obtener el seguimiento y crear unidad.

3.- Contar con la confianza incondicional de su Emperador, quién deja todo en sus manos mientras dure la guerra.

Los trigramas de este hexagrama matizan que la actitud más importante a desarrollar para conseguir el seguimiento de las tropas es la flexibilidad y el seguimiento y no la imposición y la autoridad (trigrama de la tierra), pero también la atención al peligro que conllevan dejarse llevar por objetivos egoístas (trigrama del agua), y una gran seriedad interior que no se deje asustar por los retos que le plantea el destino ni va en contra de lo que es recto y elevado (trigrama del trueno).

LÍNEAS

Las líneas de este hexagrama describen la actitud que debe asumir el líder en la conducción de su ejército. Cómo debe preparar a sus tropas, cómo debe motivarlas para que le sigan, cuándo debe avanzar y cuándo debe retirarse según lo requiera la situación para no excederse y qué actitud debe asumir conseguida la victoria para que todo esté dentro de lo recto y lo justo dentro de la seriedad que implica todo conflicto. Como toda guerra siempre acarrea daños y devastación, no debe iniciarse con ligereza y sólo se debe recurrir a ella en última instancia.

1ª Línea Un ejército ha de partir en perfecto orden. Cuando no es bueno el orden, amenaza desventura.

Wang Bi traduce esta línea por “El ejército se pone en marcha siguiendo unas normas. Apartarse de las normas es nefasto”. Para que un ejército pueda ir a la batalla debe estar fuerte y unido, disponer de una gran disciplina, respeto a las normas y obediencia. Esto se consigue cuando se muestra a las tropas que el objetivo por el que se lucha es una causa justa y convincente. Los ejércitos que se crean por motivos egoístas traen desventura.

2ª Línea ¡En medio del ejército! ¡Ventura! ¡Ninguna falla! El rey confiere un triple galardón.

Wang Bi traduce esta línea por “Situarse en el centro del ejército será afortunado, porque se reciben los favores del Cielo. El rey otorga un triple galardón, pensando en el beneficio de los diez mil estados”. A la hora de liderar un ejército y poder asumir la gran responsabilidad que se ha recibido, el general debe estar junto a sus tropas y compartir con ellas las penas y alegrías, los éxitos y las derrotas. Desde esa posición le escucharán sus consejos de ser pacientes y soportar las penurias y dificultades. Esta actitud debe ser premiada y valorada por el Emperador que le nombra porque muestra los méritos personales de este líder.

3ª Línea Acaso el ejército conduzca cadáveres en el carruaje. ¡Desventura!

En la situación han penetrado elementos inferiores desde el exterior o dentro de uno mismos. La autoridad no es ejercida por quien le corresponde, hay otros que la usurpan. Se ha actuado por el propio interés y los deseos de un ego inferior alejándose de los valores rectos y nobles. La solución cuando hay estos “cadáveres” es enterrarlos en sus tumbas y perdonar para superar los errores que oscurecieron la luz interior.

4ª Línea El ejército se retira. No hay falla.

Esta línea nos aconseja retirarnos cuando: 1) el enemigo es superior (una causa más noble, una idea más elevada…) y sabemos que no podemos vencer. No existe nobleza en aquel que se empecina en librar batalla, cueste lo que cueste; 2) no se encuentran apoyos. Es mejor replegarse a una zona de seguridad para preparar la subsiguiente estrategia y evitar la confrontación; y 3) la acción es guiada por la emoción y por tanto es reacción ante lo inferior en otros. La retirada sirve para reconectarse al desapego, recordando que debe reinar la neutralidad y la aceptación de la situación…

5ª Línea En el campo hay un montaraz. Es propicio apresarlo. No hay falla. Conduzca el de más avanzada edad el ejército. El más joven conduce cadáveres; así la perseverancia acarrea desventura.

Wang Bi traduce esta línea por “El hijo mayor lidera el ejército, porque actúa desde el centro. El hijo menor conduce carros cargados de cadáveres, ya que se ha designado a una persona inadecuada”. Cuando aparece un elemento pernicioso (exterior o interior) hay que intervenir para eliminarlo y después continuar el camino y volver a la simplicidad. Persistir en el conflicto más de lo necesario no lleva a ningún sitio. El hexagrama recuerda que en el combate siempre hay que tener al guía experto con experiencia y nunca actuar desde el caso dónde cada uno se defiende como puede.

6ª Línea El gran príncipe emite órdenes, funda Estados, otorga feudos a familias. Hombres vulgares no deben utilizarse.

Cuando se ha terminado la guerra y se ha conquistado el triunfo el Emperador otorga dádivas a sus súbditos leales con el fin de mantener la paz, pero debe prestar atención de no dejar que gentes vulgares puedan llegar al poder. A la gente que se mueve por deseos inferiores que hayan colaborado es mejor pagárseles con dinero pero no concederles predios ni derechos señoriales, a fin de que no se produzcan abusos. A nivel personal, si, de alguna manera, hemos usado otros medios que la modestia para lograr el éxito, debemos evitar asumir que tales medios son correctos porque entonces los institucionalizamos.

Referencias Bibliográficas

Vila, J. y Galvany, A. (Traduc.) (2012). Yijing. El Libro de los Cambios. Con el comentario de Wang Bi. Gerona: Atalanta.

Wilhelm, R. (1997). I Ching. El Libro de las Mutaciones. Barcelona: Edhasa.

About Pedro Jesús Jiménez Martín

Profesor Titular de Universidad. Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF). Universidad Politécnica de Madrid. Director del Proyecto de Investigación Cultura Física Oriental.

Hexagrama 6

Sung / El Conflicto (El Pleito)

Dictamen

El conflicto: eres veraz y te frenan. Detenerse con cautela a mitad de camino trae ventura. Ir hasta el fin trae desventura. Es propicio ver al gran hombre. No es propicio atravesar las grandes aguas.

Imagen

Cielo y agua se mueven en sentido contario. La imagen del conflicto. Así el noble, en todos los negocios que realiza, reflexiona debidamente a su comienzo.

Si en el Hexagrama 5 se aludía a que la espera era la preparación para atravesar las grandes aguas, aquí se describen las “grandes aguas”: los conflictos y obstáculos que aparecen en el camino hacia la meta.

En el camino hacia nuestros objetivos es normal que aparezcan conflictos. Este hexagrama aconseja cómo debemos actuar y valorarlos para poder afrontarlos.

El consejo más importante que ofrece es reflexionar-actuar debidamente al comienzo del conflicto y no dejar que evolucione la tensión porque al final las cosas suelen complicarse y los conflictos siempre terminan mal aunque gane una persona, por eso dice “detenerse con cautela a mitad de camino trae ventura”.

El conflicto aparece porque las energías de los trigramas externos del hexagrama van en direcciones opuestas (se alejan), mientras que las de los trigramas nucleares van al encuentro. La clave para solucionar el conflicto está en buscar los puntos de acuerdo (con esfuerzo y perseverancia) en la divergencia de posturas.

El hexagrama también advierte que hay que buscar ayuda por parte de alguien que esté a la altura del conflicto para recibir consejo y no meterse en un conflicto sin más. La persona a buscar debe ser alguien capaz de ver la situación desde fuera y de encontrar el punto de encuentro entre ambas posiciones.

La actitud para afrontar el conflicto aparece reflejada en los trigramas que componen este hexagrama. Hay que poner energía y creatividad para encontrar cuáles son los puntos en común que hay entre los opuestos y la solución al mismo (trigrama del cielo) a la vez que hay que tener conciencia del peligro que supone siempre entrar en un conflicto (trigrama del agua).

            Sin embargo las actitudes más importantes a analizar son sus trigramas nucleares, la actitud interior de profundizar al máximo en las raíces del problema (trigrama nuclear del viento) y la de aclarar al máximo las ideas (trigrama nuclear del fuego) para encontrar las soluciones.

LÍNEAS

Las líneas de este hexagrama desarrollan la idea de que todo conflicto termina al final en un pleito con las consecuencias que esto supone. Por eso, en cada línea advierte a la persona que mida el peso de la persona con la que se enfrenta, las consecuencias que supone incluso el ganar en el conflicto y la razón que se tenga en el asunto porque será lo que luego se debatirá en el juicio.

1ª Línea Si uno no perpetúa la cuestión habrá un poco de chismorreo. Al cabo llega la ventura.

Lo mejor para afrontar un posible conflicto es actuar cuando está en su comienzo más incipiente y no entrar en él (sobre todo si el adversario es más fuerte no es bueno dejar que las cosas avancen hasta llegar a producirse el debate del pleito). El consejo es dejar que todo quede en un cambio de palabras y así todo irá bien.

2ª Línea Uno no puede pleitear, retorna a su casa y lo elude. La gente de su ciudad, trescientas casas, quedan libres de culpa.

Cuando el conflicto es con un adversario superior no es ninguna vergüenza retirarse porque así se evitan las malas consecuencias. Dejarse llevar por el orgullo llevaría a la desgracia. Si se deja pasar el conflicto todas las personas cercanas que al final se vería implicadas quedan liberadas de la tensión que genera un conflicto.

3ª Línea Nutrirse de antigua virtud de perseverancia. Peligro, al cabo llega la ventura. Si acaso sigues obediente al servicio de un rey, no busques obras.

Aquí se advierte del peligro que implica la propensión a los arrebatos. En caso de conflicto nadie te puede quitar lo que se ha ganado honradamente en virtud de méritos previos. Cuando se está al servicio de un superior el conflicto se evita si uno evita hacer cosas para sí mismo.

4ª Línea Uno no puede pleitear, se vuelve y ataca el destino, cambia y encuentra paz en la perseverancia ¡Ventura!

Uno no está cómodo en la situación en que se encuentra y considera que debe entrar en conflicto para mejorar la situación. Se ve al adversario débil y se siente que se puede vencerle. Sin embargo, al final decide no entrar en conflicto porque no se encuentra una verdadera justificación interior para ello, su conciencia no se lo permite. Cambiando de actitud se da marcha atrás al final y se conforma con su destino. Con ello se encuentra la “paz duradera” de la armonía con la ley eterna y esto aporta ventura.

5ª Línea Pleitear ante él trae elevada ventura.

La persona decide ir a juicio porque tiene el poder, la justicia y la fuerza para imponer el derecho que le pertenece. En ese caso se puede dejar en sus manos el litigio con toda confianza. Si uno tiene razón y está en su derecho obtendrá gran ventura.

6ª Línea Aún cuando acaso a alguien se le otorgue un cinturón de cuero, al terminar la mañana le será arrancado tres veces.

Una persona va hasta el final en el juico haciendo valer su razón y lo gana. Pero la cosa no termina ahí. Al final, aunque lo gane habrá creado odios y será atacado una y otra vez entrando en un conflicto sin fin como consecuencia.

Referencias Bibliográficas

Jullien, F. (2015). Figuras de la Inmanencia (para una lectura filosófica del I Ching). Buenos Aires: El hilo de Ariadna.

Vila, J. y Galvany, A. (Traduc.) (2012). Yijing. El Libro de los Cambios. Con el comentario de Wang Bi. Gerona: Atalanta.

Wilhelm, R. (1997). I Ching. El Libro de las Mutaciones. Barcelona: Edhasa.

About Pedro Jesús Jiménez Martín

Profesor Titular de Universidad. Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF). Universidad Politécnica de Madrid. Director del Proyecto de Investigación Cultura Física Oriental.

Hexagrama 5

Hsu / La Espera (La Alimentación)

Dictamen

La espera. Si eres veraz, tendrás luz y éxito. La perseverancia trae ventura. Es propicio atravesar las grandes aguas.

Imagen

En el cielo se elevan las nubes: la imagen de la Espera. Así come y bebe el noble y permanece sereno y de buen humor.

Este hexagrama nos muestra cual debe ser la actitud cuando toca esperar a que se cumpla algo: la paciencia, y cómo afrontar los conflictos o situaciones conflictivas que aparecerán en esa espera antes de que se cumpla lo esperado.

Wilhelm (1997) apuntar al significado de este hexagrama ensalzando la imagen que alude a que las nubes dispensadoras de lluvia, el regalo que nutre la naturaleza, están en el cielo preparándose. El augurio es positivo, pero en estas circunstancias no se puede hacer otra cosa que esperar. La lluvia no se puede forzar, llegará a su debido momento. Hay que saber aguardar. Se camina hacia la meta pero hasta que no se cumpla el plazo, hasta que no sea el momento preciso, tiene que saber aguardar.

La actitud constructiva que se debe adoptar en la espera viene expresada en los trigramas que componen este hexagrama. Esperar no significa perder el tiempo, en la espera hay que tomar la iniciativa para hacer algo (trigrama del cielo). La espera debe ser un proceso creativo que uno debe aprovechar para mejorar cosas y así cuando llegue el destino uno se encontrará mejor preparado. Pero a la vez, hay que estar atentos a los peligros que pueden surgir para realizar la meta (trigrama del agua). Las líneas del hexagrama hablarán luego de cómo actuar según el grado de complejidad de las situaciones que aparecen.

 Además, hay que mantener una actitud interior de humor-alegría (trigrama nuclear del lago) porque sabemos que el destino no se puede forzar; y aprovechar interiormente para aclarar ideas (trigrama nuclear del fuego) y buscar soluciones.

Luego el consejo en la espera es no impacientarse pretendiendo configurar el porvenir con intervenciones y maquinaciones personales, ni estar preso del miedo, ni dispersarse mentalmente. El destino se cumple enteramente por sí sólo y por tanto, no hay que precipitarse sino esperar tranquilamente, acumulando energía como se expresa en el símbolo de comer y beber del hexagrama, y nutriendo el espíritu con la serenidad y el buen humor. Si se aprende a esperar adecuadamente se consiguen grandes cosas.

 

LÍNEAS

Las líneas de este hexagrama desarrolla el significado de “atravesar las grandes aguas”. Atravesar las aguas en la dinastía Zhou era atravesar el río para introducirse en terreno enemigo y esto representaba siempre un peligro. Las líneas nos dicen cómo actuar en los diferentes tipos de situación que van aparecer en la espera según el grado de conflicto que representen.  

1ª Línea Esperar en la pradera. Es propicio permanecer en lo duradero. Ningún defecto.

El peligro, los conflictos y los obstáculos todavía siguen lejos, las circunstancias son simples y la espera se realiza en una posición de tranquilidad. La persona sigue con su vida normal con la ilusión puesta simplemente en su objetivo. Se evita así una prematura dispersión de las fuerzas que en el futuro supondrían un debilitamiento. Pero el consejo es permanecer en lo duradero, es decir, aprovechar para reflexionar sobre los valores y principios que tienen peso en la vida y para la humanidad.

2ª Línea La espera en la arena. Hay alguna habladuría. Al final aporta ventura.

En la espera aparecen los primeros conflictos u obstáculos, por eso dice que estamos en la arena un medio en el que es más difícil desplazarse. Nos aproximamos al gran río. Comienzan los conflictos e incompatibilidades porque el ego empieza a verse cuestionado y surge fácilmente la inquietud. Hay inculpaciones recíprocas la base del conflicto. El consejo aquí es permanecer claro y sereno, no dejarse llevar por lo que parecen difamaciones o críticas sobre uno, hacer oídos sordos y todo irá bien.

3ª Línea La espera en el fango da lugar a la llegada del enemigo.

El fango en contacto con el agua del río no es un buen sitio para esperar si vienen las tropas enemigas. En vez de juntar fuerzas suficientes para poder cruzar las aguas de un tirón, uno ha arremetido con prematuro ímpetu para forzar la llegada a su meta, valiéndose de un impulso cuya fuerza no alcanza más que para llegar al fango. Esta situación es desfavorable porque atrae a enemigos de afuera que naturalmente aprovechan las circunstancias. Únicamente con seriedad y precaución podrá uno preservarse de perjuicios.

4ª Línea La Espera en la sangre. ¡Fuera de peligro!

La situación es extremadamente peligrosa porque la batalla en la que se ha entrado es de vida o muerte y se cierne un inminente derramamiento de sangre. Uno no puede avanzar ni retroceder y se encuentra aislado en un hoyo, un agujero. La solución es simplemente aguardar y dejar que el destino se cumpla. Esta tranquilidad, destinada a impedir que actos propios agraven aún más el daño, es el único camino para salir del peligroso agujero.

5ª Línea Esperar junto al vino y la comida. La perseverancia trae ventura.

Esta línea nos dice que la mejor espera es nutriéndose, acumulando energía para el desgaste que supone siempre llegar al objetivo. La imagen del vino nos dice además de mantener un espíritu de humor y relajación. En el peligro hay pausas de tranquilidad y recreo durante las cuales las cosas van relativamente bien. Teniendo fuerza interior hay que aprovechar esos descansos a fin de fortalecerse para una nueva lucha. Son momento para disfrutar del momento sin dejarse desviar de su meta, pues para afirmarse en la victoria se requiere perseverancia. En esta espera uno se siente seguro en lo que hace y no permite que nada lo prive de la calma propia de la serenidad interior.

6ª Línea Uno cae en el agujero. Arriban entonces tres huéspedes no convidados. Hónralos y al fin llegará la ventura.

Uno está cruzando las grandes aguas en medio del peligro y acepta lo inevitable, ha llegado el momento para el que se han acumulado las fuerzas. Pero llega un momento en que todo parece haberse hecho en vano. Pero precisamente en virtud de esta emergencia se introduce un cambio imprevisto. Sin que uno haga nada se produce desde fuera una intromisión, que en el primer momento, puede inspirar dudas en cuanto a las intenciones implicadas: no sabe si lo que trae es salvación o destrucción. En tales momentos es cuestión de permanecer mentalmente ágil. Lo que corresponde no es el encerrarse en sí mismo, con terquedad y rechazo, sino una respetuosa acogida del nuevo cambio. Así saldremos del peligro y todo irá bien. A veces los cambios felices llegan de un modo que nos parece extraño.

Referencias Bibliográficas

Jullien, F. (2015). Figuras de la Inmanencia (para una lectura filosófica del I Ching). Buenos Aires: El hilo de Ariadna.

Vila, J. y Galvany, A. (Traduc.) (2012). Yijing. El Libro de los Cambios. Con el comentario de Wang Bi. Gerona: Atalanta.

Wilhelm, R. (1997). I Ching. El Libro de las Mutaciones. Barcelona: Edhasa.

About Pedro Jesús Jiménez Martín

Profesor Titular de Universidad. Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF). Universidad Politécnica de Madrid. Director del Proyecto de Investigación Cultura Física Oriental.

Hexagrama 4

Meng / La Necedad Juvenil

El Dictamen

La Necedad Juvenil tiene éxito. No soy yo quien busca al joven necio, el joven necio me busca a mí. Al primer oráculo doy razón. Si pregunta dos, tres veces, es molestia. Cuando molesta no doy información. Es propicia la perseverancia.

La Imagen

En lo bajo, al pie de la montaña, surge un manantial: la imagen de la juventud. Así el noble, mediante su actuación escrupulosa, sustenta su carácter.

La imagen del manantial que brota al pie de la montaña describe muy bien la actitud de la juventud inexperta: el discípulo llega al maestro con mucha ingenuidad, energía e ilusión haciendo muchas preguntas para cubrir todos los huecos pero sin dirección ni experiencia.

La clave está en cómo guiar a este extraordinario aprendiz hacia su destino y así el hexagrama muestra al maestro que debe enseñar dos cosas básicas al discípulo: cómo debe acercarse de forma correcta a la enseñanza (con modestia, el alumno reconoce que no sabe y con honestidad, no hay segundas intenciones) y cómo debe actuar frente a las respuestas que le ofrece (escuchar e investigar y no preguntar por preguntar). Wang Bi lo resume diciendo “Cultivar la rectitud habiendo partido de la ignorancia es el logro del hombre sabio”.

Los trigramas del hexagrama aclaran aún más cómo debe ser esta relación maestro-discípulo: El maestro debe mostrar una imagen enraizada, estable y tranquila (trigrama de la montaña) a la vez que debe permanecer atento a los peligros que puedan producirse en el sagrado proceso de enseñanza (intenciones del discípulo, situaciones que pueden bloquear el proceso de aprendizaje, etc.) (trigrama del agua). Por dentro, el maestro debe ser muy receptivo y con capacidad de adaptación a las exigencias de la situación (trigrama de la tierra) pero a la vez creativo para ayudar al discípulo a superar sus obstáculos y su ignorancia (trigrama del trueno)

Los dos consejos principales que recuerda este hexagrama al maestro son:

1) Esperar tranquilamente a que sea el discípulo el que acuda a él. El alumno es el que busca al maestro y no al contrario. El maestro sabe que no debe brindarse espontáneamente porque todo debe ocurrir a su debido tiempo y del modo correcto. El que es ignorante busca la lucidez pero el que es lúcido no busca la turbación.

2) Ser en las respuestas al discípulo claro y concreto, sin rodeos, y ofrecer una sola respuesta que el discípulo debe aceptar-investigar como la solución que necesita a su duda o decisión. El discípulo debe valorar la importancia de cada enseñanza y no insistir de forma irreflexiva en la misma pregunta porque mostraría desconfianza hacia lo que se le enseña o que está poniendo a prueba al maestro incomodándole. En caso de ver esa actitud en el discípulo el consejo es responder con el silencio.

      

LÍNEAS

Las líneas de este hexagrama aluden a todos los aspectos citados en el texto anterior: la actitud que debe mostrar el maestro ante el alumno para asegurar el proceso de enseñanza y los indicadores que debe observar para confirmar que el tiempo es el correcto y que la energía que va a dedicar al alumno llegarán a buen puerto.

Línea 1 Con el fin de desarrollar al necio es propicio disciplinar al hombre. Deben quitarse las trabas. Continuar así trae humillación.

El comienzo de la enseñanza debe priorizarse la disciplina, la perseverancia y la concentración ya que la ingenuidad e inexperiencia de la juventud facilita que el novel pueda tomarse todo a la ligera, se desconcentre, y considere la situación como si fuese un juego. Pero no debe verse el proceso como imponer sólo disciplina, el objetivo es enseñar.

Línea 2 Soportar a los necios con benevolencia trae ventura. Saber tomar a las mujeres trae ventura. El hijo es apto para administrar la casa.

El maestro debe ser paciente con la ignorancia del alumno y establecer una relación de respeto y cuidado como se hace con la pareja: hay que saber conquistarla y mostrarla reconocimiento y aprecio. Aunque el alumno parece incapaz en verdad está desarrollando la fuerza espiritual para sobrellevar la responsabilidad que pesa sobre él.

Línea 3 No has de tomar una muchacha que ve a un hombre de bronce y ya no es dueña de sí misma. Nada es propicio.

Si en el proceso de enseñanza el maestro ve que el alumno se va en busca de otros maestros y el motivo es la ambición o la desconfianza hacia sus enseñanzas; o si el alumno viene a buscarle teniendo otros maestros por el mismo motivo, lo que demuestra es que en verdad se sigue a sí mismo, a su ego, y no será un buen alumno. El alumno debe esperar a que aparezca el maestro adecuado y una vez encontrado debe desarrollar una confianza plena en él aunque parezca que hay mejores maestros.

Línea 4 Necedad con cortedad trae humillación.

Si el alumno inexperto es muy terco en sus ideas y no se hace permeable a las enseñanzas es mejor abandonarle por un tiempo para ahorrarle la humillación que acarreará su comportamiento.

Línea 5 Necedad juvenil aporta ventura.

En esta línea se muestra al aprendiz correcto. Un hombre inexperto que de manera infantil y sin pretensiones busca enseñanza, tiene todo a su favor. Pues quien, libre de soberbia, se subordina al maestro, se verá estimulado con toda seguridad.

Línea 6 Al castigar la necedad no es propicio cometer abusos. Sólo es propicio defenderse de los abusos.

Cuando tengamos que corregir al alumno por sus errores no hay que abusar. El castigo nunca será un fin en sí mismo, sólo debe ser un método para que se establezcan de nuevo las condiciones de orden, seguridad y tranquilidad pública. Tan sólo hay que limitarse a rechazar de forma objetiva los abusos injustificados.

Referencias Bibliográficas

Jullien, F. (2015). Figuras de la Inmanencia (para una lectura filosófica del I Ching). Buenos Aires: El hilo de Ariadna.

Vila, J. y Galvany, A. (Traduc.) (2012). Yijing. El Libro de los Cambios. Con el comentario de Wang Bi. Gerona: Atalanta.

Wilhelm, R. (1997). I Ching. El Libro de las Mutaciones. Barcelona: Edhasa.

About Pedro Jesús Jiménez Martín

Profesor Titular de Universidad. Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF). Universidad Politécnica de Madrid. Director del Proyecto de Investigación Cultura Física Oriental.