Entre páginas

Una carta olvidada en un libro ha sido una cápsula del tiempo que nos ha permitido conocer a Luisa Cuesta Gutiérrez (1892-1962), bibliotecaria en la Escuela de Peritos Industriales entre 1941 y 1945.

La carta nos lleva hasta 1945, la remite un compañero de promoción de Luisa, José María Castrillo, por entonces director de las bibliotecas populares de Madrid. En ella se invita a Luisa a participar en un homenaje a otros tres compañeros de promoción por el último nombramiento de uno de ellos, Miguel Bordonau, como Inspector General de Archivos en 1945. Los otros dos compañeros a los que hace referencia la carta son Joaquín María de Navascués, Inspector General de Museos Arqueológicos desde 1940 y Enrique Sánchez Reyes, Inspector General de Bibliotecas desde 1942. Los cuatro habían aprobado las oposiciones al Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos en 1921. Para Luisa, que aprobó con el número 16, era la tercera oposición que aprobaba.

La carta estaba entre las páginas del libro “Historia General de España” de Modesto Lafuente de 1888 con el que seguro que Luisa estaba preparando alguna de sus clases. Porque por entonces, 1945, además de directora de la biblioteca de la Escuela de Peritos Industriales de Madrid, a donde llegó en noviembre de 1941, Luisa era profesora “ayudante interino gratuito” en el Instituto Cervantes en la cátedra de Geografía e Historia, cátedra a la que había opositado en 1941 ya que en 1920 había obtenido una plaza de profesora de Enseñanza Media.

El Instituto Cervantes casualmente está y estaba aquí al lado, en la glorieta de Embajadores, pero la entonces Escuela de Peritos Industriales estaba desperdigada por varios edificios en las calles Flor Alta, Marqués de Leganés, Dos Amigos y San Bernardino. Luisa comenzó a trabajar en la biblioteca cuando estaba en la calle San Mateo, 5 y era Escuela Superior de Trabajo. Fue en noviembre de 1942 cuando la biblioteca se traslada a la calle San Bernardino número 3, a la antigua fábrica de pianos Montano, ocupando el salón donde antiguamente se exhibían los pianos. En esta ubicación Luisa compartió trabajo con su hermana Modesta que se incorpora a la biblioteca de peritos en agosto de 1943.

Trayectoria académica y laboral de Luisa Cuesta Gutiérrez, bibliotecaria en la Escuela de Peritos 1941-1945

Luisa acaba su bachiller en 1910, el mismo año que se autoriza el acceso de las mujeres a la universidad. Cursa estudios de Maestra Superior en Valladolid. En 1914 aprueba con el número 1 la oposición por la que es nombrada maestra nacional y se matricula en Valladolid en Filosofía y Letras donde realiza el primer curso y se traslada a la Universidad Central de Madrid para terminar los tres años restantes. Entre 1918 y 1921 fue profesora auxiliar interina supernumeraria en la facultad de filosofía y letras, sección historia, de Valladolid. En 1920 obtiene una plaza de profesora de Enseñanza media y en 1921 aprueba las oposiciones del Cuerpo Facultativo de Archiveros, Bibliotecarios y Arqueólogos, con el número 16.

Como bibliotecaria su primer destino fue en la Universidad de Santiago de Compostela donde fue profesora auxiliar y además inició la carrera de Derecho. En 1930 pide traslado a la Biblioteca Nacional donde fue jefa del Salón de Lectura hasta el comienzo de la guerra civil.

Tiene dos doctorados por la Universidad Central de Madrid, uno en historia obtenido en 1927 y otro en Derecho en 1930, y multitud de obras publicadas sobre temas de historia de América, derecho, biblioteconomía y feminismo. En 1933 fue nombrada académica de honor de la Real Academia Hispano Americana de Cádiz y fue designada para asistir al Certamen del Libro Español celebrado en Buenos Aires. Representa a la BNE en el XXVI Congreso Internacional Americanista de Sevilla en 1935. Participó activamente en labores de salvamento y protección de obras de arte durante la guerra.

Con el final de la contienda fue depurada y condenada a traslado forzoso durante un año al Archivo de la Delegación de Hacienda de Ciudad Real.

El 3 de noviembre de 1941 Luisa Cuesta llega por concurso de traslado a la Biblioteca de la Escuela de Peritos Industriales. En 1941 oposita a cátedras de instituto de Geografía e Historia y desde 1942 compagina su trabajo como bibliotecaria con el de profesora en el Instituto Cervantes como ayudante interina y gratuita en la cátedra de Geografía e Historia.

Gana en dos ocasiones, 1944 y 1945, el Premio de Bibliografía de la BNE y en octubre de 1945 consigue traslado a la BNE donde será nombrada en 1949 Jefa de la sección de Hispanoamérica hasta su jubilación en 1962.

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2 comentarios en “Entre páginas

  1. Que historia tan preciosa…cuanta dedicación y entusiasmo se ve en esa trayectoria profesional que seguramente no le sería fácil…maravilloso descubrir estas historias…os felicito.

  2. Muchas gracias Eva. Ha sido muy gratificante localizar esta carta y con ella investigar y encontrarme con la historia de Luisa, de la que podemos decir fue compañera en esta biblioteca. Una historia de tesón como lo fue para todas las mujeres que vivieron en esa época y que a pesar de tener trayectorias académicas y profesionales impresionantes, alcanzaron metas más bajas de lo que merecían por su condición de mujeres. La historia de Luisa lo corrobora: compañeros de promoción, solo compañeros, que alcanzaron direcciones generales.

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