La mirada del adiós, Ross Macdonald
La mirada del adiós.
Ross Macdonald
Alianza Editorial
Un hombre alto, metido en los cincuenta, apareció en el vano de la puerta. De anchos hombros y elegantemente vestido, era de muy buena presencia y parecía saberlo. Su espesa cabellera blanca estaba arreglada con cuidado, con tanto cuidado como su expresión.
– ¿El señor Archer? Soy John Truttwell. – Me estrechó la mano con contenido entusiasmo y me condujo hasta su despacho.
Lew Archer es contratado por John Truttwell para investigar el robo de una caja de oro antigua en casa de los Chalmers, una familia adinerada de California. Lo que en un principio es un simple robo fácil de resolver, se va complicando con el asesinato. El hijo de los Chalmers, Nick, es el principal sospechoso, sin embargo, no todo está claro en este asunto. El pasado, la culpa permanente, las motivaciones ocultas, las conciencias atormentadas por hechos pretéritos salen a la luz. Archer tiene que encontrar la verdad. No le será fácil.
– Soy Lackland, capitán de inspectores. Me dicen que les ha hecho pasar un mal rato a mis muchachos.
– Creí que era el revés
Sus ojos examinaron mi cara
– No veo que tenga marca alguna
– Tengo derecho de llamar a un abogado
– Y nosotros tenemos derecho de contar con su cooperación. Intente resistirse y verá cómo se queda sin su licencia
– Eso me recuerda que quiero que me la devuelvan.
Un clásico de la novela policiaca llega de nuevo a las páginas de NoSoloTécnica. Al igual que en ocasiones anteriores, el crimen es el hilo conductor de la narración. Sin embargo son las pasiones humanas las verdaderas razones de la historia. La ambición desmedida, la envidia, el ansia de poder, los deseos reprimidos, el pasado que sobrevuela sobre todos los protagonistas y que enturbia sus actos, los presentes y quizás los futuros.
En realidad, cuando leemos una novela policiaca, ya se encuentre ambientada en ambientes refinados o en turbios tugurios, el hecho delictivo que se cuente ya sea un robo, un secuestro o cualquier otra variante del crimen solo es la excusa para indagar en el alma humana, en la razón, en el motivo que lleva a un ser humano a cruzar la línea del bien al mal.
Y en casi todas ellas una figura, el detective, que desde su posición ajena a los acontecimientos intenta resolver los problemas que se les presentan intentando no dejarse arrastrar por ellos.
Lew Archer al igual que otros detectives clásicos como Sam Spade o Philip Marlow intentan actuar como meros observadores, duros, fríos, metódicos, como una manera de protegerse de esa crueldad moral que les rodea aunque no siempre lo consiguen. Son también humanos.
Tengo que resolver algunos problemas y mi ordenador es un modelo pre-binario bastante anticuado. No dice sí y no. La mayoría de las veces dice “puede ser “
– ¿Acerca de mí?
– Acerca de todo
Ross Macdonald nació en Los Gatos, California en 1915. Falleció en Santa Barbara, California en 1983-
Macdonald en la Biblioteca Universitaria UPM