La casa del recuerdo y del olvido. Filip David
Desde Lecturas para compartir, en su cuenta de TikTok @biblioetsidiupm, la biblioteca ETSIDI UPM recomienda la lectura de “La casa del recuerdo y del olvido”, novela del escritor serbio judío Filip David.
En esta obra, su autor aborda la historia de cuatro hombres que siendo niños sobrevivieron al Holocausto en la antigua Yugoslavia; y, que años después se reunirán en Nueva York.
Uno de estos supervivientes, Albert Weiss, escucha el sonido constante de un tren que se desplaza por las vías. Es el sonido de la culpabilidad que arrastra consigo por no haber podido salvar a su hermano pequeño de la muerte; y, dedicará el resto de su existencia a explorar sobre el sentido del mal, y el misterio de la vida y de la muerte.
En esta exploración literaria, filosófica y mitológica sobre el origen del mal, se entrelazan magistralmente datos de la vivencia personal del exterminio judío con la Cábala y la física cuántica, en un intento del autor de trascender sus propios límites de la razón y las emociones. Destacando sorprendentemente su poder narrativo en la exposición de los acontecimientos y sus reflexiones.
Filip David es uno de los últimos “testigos vivos” del Holocausto. Esta emotiva novela sobre el sufrimiento y el dolor fue galardonada con el prestigioso Premio Nin en el año 2015. Un testimonio que atravesará el corazón de su cualquier lector por su gran erudición, sensibilidad y compromiso.
“Ese ruido… Surge a menudo. El tren en movimiento. Las ruedas del tren en movimiento. Al principio no era capaz de determinar de dónde venía el ruido. Me despertaba en mitad de la noche. Me levantaba, abría las ventanas e intentaba descubrir el origen del ruido. En vano. No había en los alrededores ni vías ni una estación de tren.
Me tapé los oídos con las manos y metí la cabeza bajo la almohada. No me ayudó. Persistente. Monótono. El ruido no cesaba.
Chucu-chucu-chucu-chuu-chucu-chucu-chuu.
Me vestí, salí de casa y vagué por las calles desiertas para escapar lo más lejos posible del monótono sonido del tren en movimiento.
El ruido me seguía. Estaba conmigo, en mí, indestructible. Me volvía loco.
Chucu-chucu-chucu-chuu-chucu-chucu-chuu.
De repente se detuvo. Pero sabía que volvería. Cada vez más fuerte, más persistente, más insoportable”