Juan Rulfo
Juan Rulfo. La voz del Llano
Rulfo nos da una imagen de México
Los demás se reducen a describir el país
Nicanor Parra. Discursos de sobremesa. 1997
Juan Rulfo es el autor de dos de los libros más leídos de todos los tiempos: Pedro Páramo y El Llano en llamas, por los que recibió innumerables premios, entre otros, el Premio Nacional de Literatura de México, en 1970 y el Premio Príncipe de Asturias de España, en 1983. Si la lectura de su obra es siempre inquietante, si se es mexicano o se conocen las secas planicies en las que transcurren sus historias, es fácil percatarse de que su narrativa no es histórica, sino antropológica. ¿Cómo es el hombre, qué sabe, qué siente en esa tierra? Su obra gira en torno a ese hombre, víctima del ritual implacable de los ciclos naturales que le confinan a un orden sin expectativa ni futuro. La naturaleza le arrebata su libertad, le empequeñece, se le impone y se convierte en la conciencia que guía sus acciones. Sus personajes se aferran a una religión natural, pagana y telúrica, y muestran un México oculto y silencioso. Pedro Páramo, su obra más conocida, es compleja por la ruptura del tiempo y el espacio, y por la recreación de la realidad a través del mundo de los sueños. Su estilo, personal y novedoso, fue uno de los detonantes del boom latinoamericano. Fue un viajero curioso e incansable y un gran aficionado a la fotografía.
