En Brasil, la producción hidroeléctrica es responsable de un 63,84% de toda la capacidad generadora de energía eléctrica y, desde hace décadas, es fundamental para el desarrollo económico del país. Sin embargo, la toma de decisiones equivocadas respecto a la implantación de las infraestructuras necesarias ha generado graves consecuencias territoriales.
A lo largo de la historia reciente de Brasil, lo que predominó fue una sobrevaloración de los beneficios de las centrales y una subestimación de los costes ambientales, sociales y, incluso, financieros. Lo que se observa también es que muchas veces las promesas de no construcción de los embalses o de reducción de su capacidad, especialmente cuando hay presión pública, no se suelen cumplir cuando llega la fecha de inicio de las obras. Esto pasó con la Central de Belo Monte en el Río Xingu, cuya capacidad había sido reducida de 11.183 MW a 5.500 MW en 2006, pero, en su configuración final, disponía de 11.233 MW.
La planificación de la producción energética en Brasil es competencia del Ministerio de Minas y Energía. Históricamente, el gobierno ha demostrado por medio de este órgano una incesante ambición por la expansión de la producción hidroeléctrica, desde 1987, cuando divulgó el Plan Nacional de Energía Eléctrica 1987/2010, previendo la instalación de 79 embalses y la inundación de 10 millones de hectáreas, hasta la actualidad, ya que el Plan Decenal de Expansión Energética 2012 – 2021 todavía prevé la construcción de 17 nuevos embalses.
Los principales impactos sociales y ambientales de la implantación de centrales hidroeléctricas derivan de la necesidad de construcción de embalses. Entre los impactos sociales están los efectos en la población indígena, debido a la pérdida de peces y de otros insumos provenientes de los ríos, la pérdida para las comunidades río abajo de la disponibilidad de agua y perjuicios para la pesca y la agricultura, la proliferación de enfermedades, transmitidas por mosquitos cuya población crece en los embalses y el reasentamiento de poblaciones urbanas y rurales. En el caso del reasentamiento de las poblaciones tradicionales de Amazonia, el problema es todavía mayor, dado que, como viven durante generaciones en el mismo lugar, su modo de vida y habilidades, como la pesca, pueden ser incompatibles en otras regiones.
Con respecto a los principales impactos ambientales, estos son la pérdida de vegetación por las inundaciones, la deforestación posterior, las emisiones de GEI por la descomposición de la flora en las regiones inundadas y la contaminación de los peces y de la población por mercurio.
Muchos de estos problemas surgen por fallos en el proceso de planificación e, incluso, la falta de participación pública. Un ejemplo es la Central Hidroeléctrica de Tucuruí. Creada en 1984 en el Estado de Pará e inicialmente con una capacidad de 4.000 MW, sus daños sociales y ambientales son tan elevados y desproporcionados comparados con sus beneficios, que el gobierno brasileño fue condenado incluso por el Tribunal Internacional de las Aguas (International Water Tribunal).
Figura 2. El embalse de Tucuruí y la Amazonia Legal oriental (Fuente: M. Fearnside, Philip. Hidrelétricas na Amazônia: Impactos Ambientais e Sociais na Tomada de Decisões sobre Grandes Obras. Vol. 1 – p. 38)
Uno de los mayores problemas fue el inicio de las obras sin una evaluación de impacto ambiental, hecha después de forma superficial. Esto justifica porque el número de personas desplazadas subieron de 9.500 en los estudios preliminares a 32.871 después de la inundación de los 2.430 km² para el embalse. Errores topográficos también causaron el desplazamiento de 3.700 personas ya reasentadas después de que sus nuevos hogares resultaran inundados. Con relación a la población indígena, áreas habitadas por tres pueblos fueron inundadas, siendo 36% del área total sumergida originalmente ocupada por los indios Parakanã. Otras comunidades fueron también afectadas indirectamente.
Con respecto a los impactos ambientales, la pérdida de floresta supera los 2.430 m² debido a la deforestación generada por nuevos habitantes y actividades económicas atraídas por la central. Hay todavía más inconvenientes, como emisión de GEI, erosión y drástica reducción en la diversidad de peces en el río. Entre las principales razones están la pequeña amplitud del análisis de impacto ambiental, tanto en términos de cantidad de temas como de periodo considerado, ya que se limitó a la fase inicial de implantación.
Como se nota, la toma de decisiones con respecto a la construcción de embalses necesita ser reformada para prevenir la elección de alternativas que resulten en injusticia social, destrucción del medio ambiente y beneficios locales despreciables. Para eso, se debe estimular de modo más intenso la participación popular efectiva a lo largo de todo el proceso de planificación. También se debe reducir la presión política sobre los órganos ambientales y generar mecanismos para realizar estudios de impactos ambientales independientes.
Un cambio en el reparto de producción energética en Brasil, como sugiere una publicación de Bloomberg New Energy Finance (BNEF), también podrá contribuir a minimizar los impactos en el territorio, dado que dentro de 25 años, la participación de las fuentes eólicas y solar, caracterizadas por un modelo de microgeneración, superará la de la hidroeléctrica.
Los próximos pasos a tomarse en Brasil son cruciales, no solo por sus impactos en la región Amazónica, sino porque, siendo financiador de la construcción de embalses en otros países de América Latina, el país tiene el poder de iniciar tendencias a escala internacional.
LUCAS MAYOR VIZEU
Bibliografía
M. Fearnside, Philip. Hidrelétricas na Amazônia: Impactos Ambientais e Sociais na Tomada de Decisões sobre Grandes Obras. Vol. 1. Manaus: Editora INPA, 2015
Salgueirinho Osório De Andrade Guerra, José Baltazar; et al. Future scenarios and trends in energy generation in Brazil: supply and demand and mitigation forecasts. Santa Catarina: 2014
Plano Nacional de Energia Elétrica 1987/2010 – Ministério de Minas e Energia
https://exame.abril.com.br/economia/solar-e-eolica-vao-eclipsar-hidreletricas-no-brasil/
http://www2.aneel.gov.br/aplicacoes/capacidadebrasil/capacidadebrasil.cfm
