Las nuevas tecnologías en el campo de la evaluación

Las nuevas tecnologías en el campo de la evaluación
23 de febrero de 2016 Miriam López

 

Los grandes avances desarrollados en el campo de las tecnologías de la información y comunicación, principalmente a partir de las últimas décadas del siglo XX, se han intensificado en nuestros días, produciendo cambios significativos en la estructura económica y social, y en el conjunto de las relaciones sociales.

Las nuevas tecnologías de la información y la comunicación se aplican actualmente en todos los ámbitos económicos y se integran en el día a día de las actividades empresariales, científicas, técnicas y educativas. Su utilización ha permitido, por un lado, la realización de actividades de forma más rápida y eficaz y, por otro, introducir nuevas formas y metodologías de trabajo, alentadas por la universalización de los intercambios de información y de las relaciones sociales.

Este desarrollo, al igual que ocurre con el resto de aspectos socioeconómicos, no se ha producido a nivel mundial de forma equilibrada. Esto ha dado lugar a la denominada brecha digital, término referido a las barreras geográficas, económicas, sociales y de alfabetización informática que limitan el uso y apropiación de las nuevas tecnologías de la información.

Según “The Statistics Portal” en 2012 el cálculo de esta brecha digital suponía que tan sólo el 34% de la población tenía acceso a internet. En 2015, según esta misma fuente, esta cifra habría aumentado hasta un 43,4%, sin embargo, las diferencias en el uso y acceso a internet siguen siendo una realidad.

http://www.statista.com/chart/3512/internet-adoption-in-2015/

En el campo de la evaluación, el concepto de brecha digital, adquiere gran importancia, más aún cuando sus actividades se dirigen a la evaluación de programas e iniciativas que tienen lugar en territorios rurales. En este caso, la brecha digital no es tan sólo una cuestión que afecte a los países en desarrollo sino también a los países desarrollados, en los que las áreas rurales menos pobladas, cuentan a menudo con problemas de acceso a internet y, aun cuando tienen acceso, con un menor número de usuarios. Pese a estas cuestiones, el desarrollo de las nuevas tecnologías nos ofrece alternativas que permiten trabajar en zonas, en principio, menos favorables para el uso de dispositivos tecnológicos.

Se abre así un mundo de posibilidades en el campo de la evaluación que los evaluadores deben tener en cuenta a la hora de programar y establecer sus rutinas de trabajo e investigación. Por ello, es importante conocer, experimentar y adaptar estas nuevas herramientas que el avance de las nuevas tecnologías nos ofrece y que nos permiten mejorar el desarrollo del proceso de la evaluación.

Las nuevas tecnologías aplicadas al campo de la evaluación han permitido mejorar la gestión, sistematización y análisis de la información recopilada obteniendo resultados en menos tiempo y de forma más eficaz. En cada una de las etapas de la evaluación: estructuración; observación; análisis y juicio; sea trabajo de campo o de gabinete; nos encontramos con multitud de herramientas que nos facilitan el trabajo del día a día.

(ver post: ¿Qué ofrecen las tecnologías en el campo de la evaluación? Algunas herramientas)