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Instalación de inclinómetros
Cuando queremos conocer los movimientos horizontales en el terreno, en una presa, en una pantalla de contención.. es frecuente la instalación de inclinómetros. Para que la información de las sucesivas campañas sea fiable es necesario que la instalación de las tuberías inclinométricas se realicen adecuadamente. A continuación se icnluyen algunas de las recomendaciones que suelen incluir el CEDEX en sus pliegos.
Los sondeos para la instalación de los inclinómetros tendrán un diámetro mínimo de 101 mm y serán perforados a rotación por el método convencional con recuperación de testigo. Posteriormente se procederá a la instalación de la instrumentación correspondiente.
La instalación de los inclinómetros se comenzará uniendo la tubería en tramos de 2 m antes de que finalice la perforación del sondeo con el fin de tenerla preparada y agilizar así el tiempo de instalación.
Una vez finalizada la perforación de los sondeos, se procederá a la instalación de la correspondiente tubería de auscultación con los correspondientes manguitos de conexión, y las tapas de fondo y cabeza.
Las tuberías de auscultación deberán llevar adosado en una de sus generatrices al menos dos macarrones flexibles de unos 20 mm de diámetro, uno hasta el fondo de la perforación y el otro hasta unos 2/3 de dicha profundidad (el segundo quedaría como reserva), para posteriormente inyectar la lechada a través de el inferior y que el llenado del taladro se produzca desde abajo hacia arriba.
Debe disponerse en obra de longitud suficiente de macarrón flexible para poder inyectar los sondeos, teniendo presente la longitud entre la boca del sondeo y la bomba, así como los correspondientes elementos de acople a la bomba inyectora.
La máquina de sondeos debe disponer de una bomba adecuada para poder realizar la inyección de la lechada de bentonita-cemento. Si la bomba no tiene potencia suficiente, no impulsa bien la lechada, que acaba por fraguar dentro del macarrón de inyección y, por tanto, lo hace inservible. Por lo tanto, es importante que se disponga de un sistema adecuado de mezclado y batido de la lechada para evitar la formación de grumos.
Es recomendable atar una cuerda a su extremo inferior con el fin de evitar que se pueda soltar algún manguito de unión. A medida que se va montando tubería y descendiendo por el sondeo se sujeta de la cuerda para no soportar todo el peso por el tramo de tubería que se esté montando en ese momento. Asimismo puede ser necesario introducir agua en la tubería inclinométrica para contrarrestar su flotabilidad.
Para la unión de las tuberías se atornillaran en la zona de manguitos con los tornillos específicos del equipo y, una vez colocados, se aplicará cinta adhesiva vulcanizada en esa zona para dar estanqueidad a la tubería.
Una vez que la tubería apoya en el fondo del sondeo se debe proceder a la inyección del taladro: Para ello, lo primero que se debe hacer es llenar de agua la tubería para evitar que se produzca un efecto de flotación al introducir la lechada y limitar el riesgo de entrada de lechada a la tubería. No obstante, durante la inyección se debe estar atento para evitar que esto ocurra.
A continuación, se debe tapar la boca de la tubería con un tapón para evitar que entre lechada o cualquier tipo de suciedad en la misma y proceder al llenado, mediante el macarrón dispuesto al efecto, del espacio anular entre la tubería de auscultación y las paredes del sondeo. La dosificación más usualmente usada para la lechada es de 100 litros de agua, 50 kg de cemento y 5 kg de bentonita.
Finalmente, una vez llenado de lechada se debe esperar cierto tiempo para volver a rellenar puesto que la lechada decantará algo. Como remate se debe colocar la boquilla adosada a la parte superior de la tubería que forma parte de los accesorios suministrados con la misma.
La boca de cada uno de los sondeos deberá quedar protegida y enrasada con la superficie del terreno, pudiéndose realizar mediciones en fechas posteriores a su instalación. A tal efecto se deberá dejar una arqueta con una tapa metálica y cerrada. Estas arquetas tienen la finalidad de proteger a la tubería y de que todo quede enrasado y no sobresalga nada por encima de la cota de rasante. Las dimensiones aproximadas serán de 40×40 cm
Inyección de bulones/anclajes
En esta entrada quiero compartir una serie de reglas de buena práctica que conviene tener en cuenta en la construcción de anclajes y bulones, basadas en la norma “Recomendaciones para el proyecto, construcción y control de anclajes al terreno. H.P. 8-96”
Generalidades. Procedimiento operativo
La operación de inyección se realizará siempre de abajo a arriba y no podrá interrumpirse tras su inicio. En caso de emergencia que obligue a una interrupción, se extraerá completamente el bulón y se procederá a limpiar el sondeo de forma inmediata mediante algún procedimiento que no perjudique las condiciones geotécnicas del suelo.
El procedimiento de inyección empleado deberá asegurar la libre salida del agua y el aire, por tubos de purga o por la boca del sondeo, con objeto de asegurar el perfecto llenado del taladro.
La operación de inyección debe realizarse antes de 30 minutos tras la preparación de la lechada, aunque este período de tiempo deberá fijarse en función del tipo de cemento, dosificación real, empleo de aditivos, etc.
El proceso de inyección, y la configuración de los bulones, deben garantizar el libre alargamiento en la zona libre, así como que no se transmita la fuerza entre terreno y bulón en esta primera parte. Es conveniente colocar una cinta alrededor del bulón (o incluso una vaina de PVC) en estos primeros metros para aislarlo de la lechada y que no se pueda producir arrancamiento.
El proceso de inyección se realizará en el menor tiempo posible desde la colocación de la armadura. Deberá observarse si se producen desprendimientos en el sondeo, en este caso se debería reducir al máximo el período de tiempo hasta la inyección, desde la ejecución del sondeo y colocación del bulón.
El procedimiento de inyección empleado, asegurará que no queden inclusiones de agua, aire u otro fluido en la zona inyectada.
Después de realizada la inyección, no se moverá ni manipulará el anclaje, permitiéndose el fraguado y endurecimiento de la lechada sin perturbaciones, hasta que se obtenga la resistencia necesaria de la misma.
Características de la lechada
La lechada de cemento para inyección se dosificará con una relación agua/ cemento de 0,4.
La resistencia mínima exigible a cualquier lechada de inyección no deberá ser inferior a 450 Kg/ cm2 a los 28 días.
Podrá procederse al tesado del anclaje cuando haya transcurrido un período de unos 4 días desde la inyección. Si el tesado de los primeros anclajes resulta satisfactorio, se podría reducir este período de tiempo a 3 días.
Además de tener en cuenta todo lo anteriormente mencionado, se recomienda ejecutar algún bulón de prueba, en una zona auxiliar, de forma que en caso de fallo no afecte a la obra.