Reparación de un muro verde incendiado
A continuación se describe el caso en el que un incendio afectó a la mayor parte de la superficie frontal de un muro de suelo reforzado cubierto en su zona frontal por vegetación. El fuego produjo el deterioro general del geotextil frontal así como de la geomalla. Además, en numerosos puntos existían roturas locales del geotextil (del orden de 50 cmx30 cm) quedando el relleno sin protección alguna.
Como se puede observar en el siguiente esquema, los muros verdes están constituidos por una serie de geotextiles que envuelven “tongadas” de material (del orden de unos 30 cm de espesor). Una vez construido el muro se coloca una geomalla que sirve para colocar la tierra vegetal que permitan realizar las correspondientes plantaciones.
La estabilidad general del muro se confiere mediante el gotextil horizontal existente entre tongadas. La función del gotextil en la zona frontal y de la geomembrana es de confinamiento del terreno (aunque tiene una cierta resistencia a tracción).
El principal peligro que existe en una situación como la descrita es la pérdida de material por las zonas donde se ha roto el geotextil y la membrana. Si este fenómeno se produjera podría afectar a la estabilidad local o general del muro.
¿Soluciones?
De manera provisional podrían colocar parches de geotextil unidos a las zonas contiguas.
Pero a medio plazo debería pensarse en restituir el muro a su situación inicial. Para ello debería reponerse todo el geotextil de la zona frontal donde está deteriorado. A continuación, se colocaría nuevamente la geomalla que permita colocar la tierra vegetal. Por último, se procedería a llevar a cabo las correspondientes plantaciones.
Célula Osterberg
Uno de los procedimientos para estimar la carga de hundimiento de un pilote es mediante la célula Osterberg que ha desarrollado la empresa Loadtest.
¿En que consiste la célula Osterberg?
Está constituida por dos platos metálicos paralelos entre los cuales se colocan una serie de gatos, cuyo número y capacidad depende de la carga que se quiera aplicar al pilote. Los gatos aplican su carga a través de un circuito hidráulico. Al ser aplicada la carga el pilote comienza a solicitarse en dos direcciones. Hacia arriba evalúa la resistencia por fuste y hacia abajo la resistencia por punta y la zona del tramo de fuste existente entre célula y punta. Se puede registrar de manera separada ambas resistencias.
En cada ensayo se debe establecer la posición de la célula. Inicialmente, podría pensarse en colocar cerca de la punta para diferencia claramente la resistencia por fuste y punta. Pero si la resistencia por punta fuera muy pequeña podría suceder que se agotara el recorrido de la célula sin haber agotado el fuste. Por ello es necesario realizar un estudio de la ubicación para cada ensayo. Pero además, es recomendable disponer un único tramo de tubo tremie entre la célula y la punta. Y esto limitará a un máximo de 10 m la ubicación por encima de la punta.
Los pilotes ensayados se pueden volver a emplear si más que inyectar con lechada de la zona de la célula.
El ensayo se detiene cuando se agota la carga de la célula o la resistencia del terreno (de la zona inferior o de la zona superior).
¿Qué se obtiene en el ensayo?
En el siguiente gráfico se muestra de manera esquemática la posible distribución de resistencias desarrolladas durante el ensayo.
- En abcisas se ha representado la carga aplicada en la célula, en cada una de las dos direcciones (hacia arriba y hacia abajo).
- En la parte superior se ha representado la resistencia por fuste movilizada. La carga inicial indicada correspondería al peso del pilote.
- En la parte inferior de la figura se ha representado la variación de la resistencia por punta movilizada en función de la carga aplicada en la célula.
Se han incluido dos rectas. Una de ellas corresponde a la hipótesis de que el tramo inferior del fuste no contribuya a resistir la carga aplicada con la célula (= 0) y toda la reacción se produzca por la punta. La otra línea correspondería a la situación en la cual se movilizase la resistencia por fuste teórica en el tramo inferior del pilote. Realmente lo más probable es que la situación sea intermedia entre las dos citadas: la punta comenzará a contribuir (conjuntamente con el fuste) desde el primer momento.
En el ensayo, en realidad, se obtendrá un gráfico en el que se represente en abcisas la carga aplicada y en ordenadas los desplazamientos de la zona superior del pilote y de la zona inferior. Y a partir de la deformación se puede obtener la resistencia unitaria.
Esto sólo ha sido un pequeño apunte para que concozcáis este modo de obtener la carga de hundimiento de un pilote, o al menos, un límite inferiro de la resistencia del terreno. Para más detalles ver http://www.loadtest.com/services_int/ocelltechnology.htm