¿QUÉ APRENDEMOS DE LA NATURALEZA?
Segundo día de sesión y hoy entramos de lleno a hablar de un concepto que ya sobrevoló en la primera sesión “Soluciones basadas en la Naturaleza”. Ok ¿Pero esto por qué? y ¿para qué?
Pues no nos queda de otra. Existe una crisis ambiental grave y las soluciones que hemos ido aplicando hasta ahora no son suficientes e incluso han perjudicado más nuestro entorno. Entonces ¿Qué podemos hacer? ¿Está todo perdido?
Calma ahí, que ante un problema siempre hay una o más soluciones; y ahora los científicos están observando la naturaleza para aprender cómo funciona y así ayudar a cuidarla y a que nuestra actividad sea lo menos nociva para ella. De estos aprendizajes se están desarrollando acciones y políticas que se basan en sus principios y cualidades. Y hay dos formas de hacerlo:
- Ayudando a la naturaleza: por ejemplo tras un incendio, al perderse la vegetación la tierra queda suelta y con el agua y aire se desliza ladera abajo. Así no hay semilla que quede fija y pueda crecer de forma natural. Una solución es que los troncos se pongan apaisados reteniendo así la tierra y dando margen para que las semillas puedan fijarse y crecer. F
- Imitando a la naturaleza o Biomímesis: Un ejemplo sencillo es la invención del velcro, este invento se inspira en cómo se adherían las semillas a la ropa y a los perros. Pero también, podemos pensar en cómo construyen con ramas y barro algunos pájaros sus casas y el parecido que puede tener con las primeras viviendas de adobe y que aún hoy se conservan.
Ejemplos de un tipo y otro hay muchas, y en algunos casos se llevan realizando desde hace mucho tiempo porque son más sencillas y eficaces; y pueden ser muy resistentes al paso del tiempo, por ejemplo ¡¡veíamos que las casas de bambú son super resistentes a terremotos y huracanes!!
Pero además de observar y aprender de la naturaleza, es muy importante la imaginación y la creatividad para que esos aprendizajes podamos traducirlos en acciones. Las ideas más disparatadas pueden ser luego las mejores. Y un ejemplo nos lo pusieron los compañeros de Basurama.
A principios de este año, hubo en Madrid una gran nevada, que fue muy divertida porque de repente el paisaje habitual se tiñó de blanco y se pudo hacer cosas que antes no se podía: guerra de bolas, muñecos enormes de nieve, improvisar trineos…. Pero también generó graves problemas especialmente en el arbolado. En Madrid no suele haber nieve, o cuando ha habido, suele ser poca y se derrite rápido (es lo que tiene nuestro clima mediterráneo). Pero esta vez no fue así, y los árboles tuvieron que soportar mucho peso y durante muchos días. Los más fuertes aguantaron y soportaron el peso, pero otros muchos, más mayores o más jóvenes, soportar este peso fue un gran esfuerzo y se cayeron. ¿Qué pasó con los árboles caídos? Mucha fue a parar a Valdemingómez, un vertedero enorme donde van a parar todos los residuos de la Ciudad de Madrid, y habitualmente se quemaban.
Pero un colectivo, Basurama, y algunos coles dijeron “¡Alto ahí! ¿Y si esa madera en lugar de tratarla cómo basura la utilizamos como un recurso para hacer juegos, mesas, sillas… para los patios? Se pusieron manos a la obra y rescataron estos troncos enormes y en buen estado del vertedero y con ayuda de chicos y chicas de estos centros educativos estuvieron diseñando y construyendo con estos troncos diferentes objetos.
Con todas estas ideas concluimos la sesión, pero antes de hacerlo nos quedamos con una pregunta en el aire ¿Qué objeto que abunda en el cole podríamos reutilizar en lugar de tirarlo a poco que se estropea?