DE VILLAVERDE Y USERA HASTA ARGANZUELA
El pasado 22 de octubre tuvimos la gran oportunidad de salir de los dos distritos donde solemos trabajar, nos fuimos hasta Arganzuela, un distrito ubicado al este del río Manzanares y dentro del perímetro de la M30, Concretamente se trata del colegio Miguel de Unamuno, situado en el barrio Legazpi. Un colegio con una problemática muy importante a nivel de contaminación atmosférica debido a la presencia de las famosas cocina fantasma, unas cocinas con grandes chimeneas industriales, que se encargan de la preparación y venta a gran escala de comida a domicilio ubicadas pared con pared de este colegio y a su vez en una importante zona residencial, además con la consecuente presencia de motos y coches de reparto que ello supone..
Estando acostumbrados a un público entre los 11 y 17 años, esta vez ampliamos nuestro rango de edad, ya que nos acompañaron profesores, personal del colegio, peques, junto con padres y madres de familia. Juntos disfrutamos de una soleada mañana de otoño, en la que utilizamos los sensores Low Cost con los que trabajamos para medir la contaminación atmosférica y calidad del agua del Manzanares a su paso por Madrid Río, una de las zonas donde más canalizado se encuentra nuestro río.
Gracias a la implicación y al compromiso de los padres y madres de familia de la Comisión Trimestre Verde de la AFA (Asociación de Familias del Alumnado), pudimos medir y darnos cuenta de primera mano, cuál es el estado medioambiental de esta zona, donde los más peques se divirtieron mucho pudiendo hacer el papel de científicos por un día ya que ganas, energía y mucha participación fue lo que más aportaron, con preguntas y respuestas que solo salen de esa gran imaginación que tienen y, así dar a entender que con poca inversión y con todo el material que compartimos, estos sensores pueden ser montados por cualquier grupo de interés y de esta forma poder denunciar las actividades que perjudican la salud de las personas y la calidad ambiental de nuestros barrios.
También en nuestro paseo pudimos contemplar la diversidad de flora y fauna que tiene Madrid Río y pudimos explicar como la apertura de distintas compuertas de las presas que hay a lo largo del río, para tratar de recuperar parte el estado natural del río atrajo la presencia de distintos animales que ya habíamos dado por perdidos, como el barbo común, Barbus bocagei y la nutria, Lutra lutra, alimentándose de especies muy dañinas para nuestros ecosistemas acuáticos como lo es el cangrejo americano, Procambarus clarkii.
También gracias a la participación de una de las alumnas del Miguel de Unamuno pudimos calcular cuánto tarda el agua en desembocar en el océano Atlántico, 11,3 días, ya que la velocidad media de nuestro río era de 1m/s y la distancia fluvial que hay desde nuestro punto hasta la desembocadura del Tajo en Lisboa es de 980 km (por lo tanto: 980 km = 980.000 m; y un día tiene 86.400 segundos, al dividir 980.000/86.400, tendremos los días que tarda en llegar el agua o cualquier contaminante al mar).
Gracias a la Comisión Trimestre Verde de la AFA del Unamuno pudimos hacer llegar Ecología a pie de barrio a uno de los barrios más afectados por el tema de la contaminación atmosférica del distrito de Arganzuela. Esperamos poder hacer más rutas como esta, donde el conocimiento de la ciencia y la tecnología llegue realmente a todo ciudadano/a y no represente una barrera, sino más bien una herramienta y una posibilidad para poder conocer la salud de nuestro entorno y cómo esta influye directamente sobre la salud de sus habitantes..
¡¡ Muchas gracias y hasta pronto !!
