Reciclar baterías de smartphones para electrificación rural

Fuente: phys.org

Ir a la noticia original

A pesar de su alto precio, la vida media de los smartphones suele ser de unos tres años. Sin embargo las baterías de lítio que incluyen pueden durar unos cinco años. Para mitigar los residuos medioambientales generados y proporcionar sistemas de almacenamiento de energía a comunidades rurales, investigadores de la Universidad Kyung Hee de Seúl han propuesto un modelo para reciclar estas baterías, de forma que puedan ser usadas como baterías en lámparas solares.

Boucar Diouf, profesor de la Universidad Kyung Hee, describió la logística de su programa de reciclado la semana pasada en el  “Journal of Renewable and Sustainable Energy”. El programa propuesto consiste en cinco pasos generales: recolección de baterías, testeo y selección, fabricación de sistemas, comercialización e instalación. Cada uno de estos pasos es, además, una oportunidad de generación de empleo.

Las lámparas de queroseno usadas para iluminar los hogares en muchas comunidades rurales son dañinas para la salud, ineficientes y más caras que una lámpara solar, si se toma el enfoque adecuado. Las baterías son uno de los componentes más caros de estos sistemas. Una batería de teléfono móvil estándar de 1000 miliamperios-hora puede proveer 3 horas de energía a una lámpara LED, o seis horas de energía a una lámpara de 0,5W (suficiente para leer y escribir, necesidad acuciante en estos contextos de niños en edad escolar). En estos sistemas, las baterías podrían durar unos 3 años sin mantenimiento.

Los investigadores también han desarrollado un sistema más grande de 12 voltios compuesto por tres baterías de móviles de 3100 miliamperios-hora, con una lámpara LED de 5 vatios y un panel solar pequeño por menos de 25 dólares. Este sistema sería capaz de iluminar una habitación cinco horas cada día, durando unos 3 años sin mantenimiento.

Las próximas investigaciones del grupo incluirán probar sistemas de recogida de baterías y reciclado, queriendo hacer una prueba piloto en Senegal y otros países del África Sub-Sahariana el año que viene.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *