El barrio de 7 Wien surge como una crítica a lo “fake”, por lo cual se crean 7 distritos basados en los 7 pecados capitales, donde tras falsas fachadas se esconden espacios completamente distintos a los que aparenta, y que buscan recrear Viena para convertirse espacio en turístico.

Respecto a las viviendas, todos los espacios de terrazas dan a una zona pública exterior con distintas cualidades, que buscan albergar todos los aspectos necesarios en una única manzana. Para ello, se intercalan espacios verdes y urbanos donde se trata desde la cultura, hasta el espacio de ocio y descanso.

Estos espacios exteriores a los que dan las viviendas son una serie de plazas que buscan crear ambientes distintos. Para ello, cada uno cuenta con una peculiaridad distintas; encontramos una plaza cultural donde paneles móviles permiten crear un gran corredor donde realizar exposiciones, por otro lado encontramos una plaza de juegos con grabados infantiles para que nos más pequeños puedan entretenerse e interactuar entre ellos, otro plaza es la clásica con un fuente que marca el centro y a su alrededor una serie de sombrillas con mesas y sillas, otra plaza se transforma en un micro bosque con pequeño mobiliario urbano para descansar, un espacio en forma de pasillo con grandes maceteros que permiten crear un huerto urbano que a su vez son bancos, etc.

Para conseguir en este peculiar barrio ese gran turismo que se busca, pero también residentes permanentes, se crean unas viviendas totalmente adaptables gracias a una serie de bloques móviles y un espacio diáfano que permiten adaptar la vivienda a la actividad que se desee realizar. Además, no solo encontramos un tipo de vivienda unifamiliar y privada, si no también un tipo de vivienda comunitaria que permite a los residentes, permanentes o temporales, mantener una mayor relación y contacto, favoreciendo la relación entre personas.

Respecto a la construcción, encontramos que en el perímetro de manzana, la fachada falsa oculta la verdadera del edificio, pero cuyas aperturas coinciden con las ventanas reales permitiendo el paso de luz. Los forjados son de bovedillas y cuentan con falso techo, y en la cubierta plana se puede observar como una parte está dedicada a a la cubierta vegetal, y la otra es transitable para el paso de personas y donde se colocan los paneles solares que abastecen de energía el edificio.