Saludos a todos. La entrada que voy a hacer hoy es sobre mi identidad digital. Se nos pidió en clase que realizáramos una propuesta de plan de identidad digital según nuestros objetivos, y esto me hizo reflexionar.

Por un lado, ¿cuál es la huella digital que voy dejando día a día? Las primeras cosas que pueden venir a la mente son las típicas redes sociales como Facebook, Instagram, Twitter, YouTube o LinkedIn, pero pensándolo un poco más te das cuenta que también estás dejando una huella cada vez que ves un nuevo capítulo en Netflix, o buscas algo nuevo que comprar en Amazon o Wallapop. Incluso cuando lo compras, si pagas con tarjeta, estás dejando una huella digital directamente vinculada a ti y la aplicación de tu banco.

Podemos pensar que muchas de estas aplicaciones no están directamente vinculadas a nuestra persona, pero en realidad prácticamente todo lo que usamos está vinculado a nuestro nombre, nuestro correo electrónico (probablemente de Google), nuestro número de teléfono o nuestro Facebook (el cual además estará vinculado también a un correo). Es prácticamente imposible generar una huella que no esté conectada a nosotros de una manera u otra.

Una vez hecho este análisis, pasé a razonar cuál es exactamente mi identidad digital actual, es decir, qué es lo que hago conscientemente en la red que genere una identidad en la misma. El resultado fue el mostrado en la siguiente imagen.

Mi identidad digital profesional es prácticamente inexistente, ya que lo único que tengo con ese objetivo es un perfil en LinkedIn que apenas uso. Con esto, quedó más que claro que esa es la pata de la que cojeo. Por tanto, el plan de identidad digital que he elaborado tiene un enfoque puramente profesional.

Si habéis llegado hasta el final de este post, un saludo y gracias por su atención.