Quizá hayáis leído que el Herbario EMMA tiene asociada una colección de materiales vegetales fósiles. Como todavía no está informatizada, los datos asociados a estos restos no son fácilmente accesibles, hay que buscarlos en las publicaciones científicas de cada trabajo. El origen de estas muestras es el trabajo acumulado de una de las líneas de investigación del grupo Historia y Dinámica del Paisaje Vegetal (UPM).
A modo de introducción, aquí va un vídeo divulgativo que hizo una de las colaboradoras de este equipo, Fátima Franco, que trabaja con polen fósil en la Universidad Autónoma de Madrid:
El polen es el indicador más utilizado en las reconstrucciones de la dinámica de la vegetación de los últimos milenios. Para aumentar la precisión de estas reconstrucciones es imprescindible contar con datos extraídos de otros indicadores vegetales o, incluso, de otro tipo de fuentes (archivos históricos, por ejemplo). Entre esos otros indicadores vegetales destacan los restos de maderas, piñas y frutos. La mayor parte de los restos de la colección EMMA-Paleo son maderas. Nada sorprendente si pensamos que se trata de un herbario alimentado por grupos de investigación y unidades docentes del ámbito forestal.
Esta madera que hemos puesto de ejemplo forma parte de un estudio que se publicó en 1997: Roig et al., 1997.