El puente de Kohlrausch es un equipo para determinar el valor de la resistencia eléctrica de un electrolito. Es similar al tradicional puente de Wheatstone, esto es, consta de cuatro resistencias, tres de ellas conocidas (una patrón y otras dos que se pueden regular) y una cuarta, la problema, por determinar. Pero se diferencia  de este último en los siguientes aspectos: el puente de Kohlrausch se usa, especialmente, para líquidos conductores; utiliza corriente alterna (producida por una pequeña bobina de inducción), pues la corriente continua polarizaría el líquido, falseando su resistencia; no usa un galvanómetro para ver la condición de equilibrado del puente (corriente central nula), sino un auricular de teléfono en el que se puede escuchar el ruido de la corriente que pasa, de modo que la condición de equilibrado se tiene cuando se deja de oír dicho ruido. Entonces, en esta condición de puente equilibrado, la resistencia problema es el producto de la resistencia patrón por la razón de las dos resistencias variables obtenidas moviendo un cursor sobre un hilo metálico hasta tener corriente central nula.

Este puente fue diseñado, hacia 1880, por el físico alemán Doctor Friedrich Wilhelm George Kohlrausch (1840-1910), Catedrático de Física en Gotinga, Zurich, Darmstadt, Würzburgo y Estrasburgo, experto en la conductividad eléctrica de electrolitos. Algunos investigadores de finales del siglo XIX incluso utilizaron este puente para medir la resistencia eléctrica del cuerpo humano.

El ejemplar del museo, perteneciente a nuestros Laboratorios de Física y Termotecnia, es de cobre y latón, con base de madera, protección del tambor en madera y vidrio, y con piezas aislantes negras de ebonita, y tiene unas dimensiones de 24,7 cm x 19,1 cm x 20,0 cm. Presenta la resistencia patrón en la esquina superior derecha, mientras la conexión al electrolito problema se hace en la esquina superior izquierda; en las dos esquinas inferiores están las dos resistencias que se pueden regular, lo cual se consigue moviendo, sobre una regla graduada, un cursor de disco de contacto unido a un tambor que gira mediante una manivela, insertando diferente resistencia según el trozo del largo hilo aplicado que, para ahorrar espacio, va enrollado sobre un tambor.

Este puente, que presenta el número 380 en su tapa izquierda, fue fabricado, probablemente hacia 1900, por la prestigiosa casa alemana de instrumentación Hartmann & Braun A. G. en Frankfurt, empresa que había sido fundada en 1879 por el empresario Wilhelm Eugen Hartmann (1853-1915) y el industrial Wunibald Braun (1839-1912), y que, a partir de 1920, se haría famosa también por sus equipos de control. En la actualidad, aún existe esta empresa, pero formando parte del grupo ABB, nacido en Zúrich tras una gran fusión en 1988 de ASEA y BBC, y que es una referencia mundial, entre otras cosas, en equipos digitales para la industria.

Catalogación, documentación, texto y fotografía: Prof. A. Vitores (2021)