205. Micrómetro de 0,01 mm de precisión (ca. 1970)

El micrómetro es, como su nombre de origen griego indica, un instrumento de medida destinado a determinar el valor de pequeñas longitudes, por ejemplo, espesores de láminas, con bastante precisión, incluso mejor que la que ofrece el calibre. También se le llama tornillo micrométrico, ya que funciona mediante un tornillo de rosca de paso constante, o palmer, por el apellido de su inventor.

El palmer, fabricado en metal, consta de una abrazadera en forma de U cuyo extremo derecho presenta un orificio por el que avanza un tornillo micrométrico que se hace girar mediante una cabeza cilíndrica, quedando la pieza a medir sujeta entre dicho tornillo y el extremo izquierdo de la abrazadera.

Como escalas de medida, el palmer presenta una escala principal, grabada en su barra cilíndrica fija, y otra escala secundaria o auxiliar, a modo de nonius, grabada sobre el tambor cilíndrico hueco que se gira manualmente. El tambor gira de modo que a cada vuelta completa avanza un paso en la rosca del tornillo.

En cuanto al valor de las medidas que se obtienen con este instrumento, éstas constan de una parte entera, dada por la posición que indica el borde del nonius sobre la escala principal, y otra centesimal dada por la raya del nonius que se observe que está alineada con la línea central del cilindro fijo de la escala principal. En la actualidad, la tarea de lectura es más sencilla porque muchos micrómetros llevan acoplada una pequeña pantalla digital que ofrece directa y numéricamente el valor medido.

La precisión del palmer, esto es, lo mínimo que puede apreciarse con él, viene determinada por la razón entre el valor de la mínima división de la escala principal y el número total de divisiones que tiene el nonius. Así, en el caso más habitual, la escala principal está dividida en medios mm y su nonius tiene cincuenta divisiones, con lo que su precisión será de 0,5/50 = 0,01 mm. O, dicho de otra manera, cuando el nonius da una vuelta entera (50 divisiones), el tornillo avanza 0,5 mm, de modo que cada dos vueltas del nonius se avanza 1 mm en la escala principal.

Este tipo de instrumento, en su modelo de mano, fue diseñado en 1848 por el mecánico francés Jean Laurent Palmer, si bien tiene su precedente en el modelo de banco de tornillo micrométrico, de 1829, del ingeniero e inventor británico Henry Maudslay. A su vez, como sistema de medición precisa basada en el nonius, tiene sus raíces en el nonius de 1514, por parte del matemático, astrónomo y geógrafo portugués Pedro Nunes (1502-1578) y del uso de éste en el calibre, en 1631, por el matemático francés Pierre Vernier (1580-1637). Así mismo, también se basó en el invento del tornillo micrométrico, en 1640, diseñado inicialmente para mejorar la precisión en los instrumentos astronómicos, por parte del astrónomo y fabricante de instrumentos inglés William Gascoigne (1612-1644).

El palmer de nuestra colección presenta el cuerpo de la abrazadera en acero pintado en verde metalizado y con las escalas de lectura en acero inoxidable. Tiene una extensión de 13,4 cm (en posición cerrada), 6 cm de alto y un grosor de 1,8 cm, y su grado de apertura permite medir objetos de hasta 25 mm. Su escala fija tiene 0,5 mm en cada división superior (las divisiones inferiores van de mm en mm) y su nonius de tambor tiene 50 divisiones, con lo que la precisión del aparato es de 0,5/50 = 0,01 mm. En su extremo derecho, tras el tambor del nonius, presenta un sistema de frenado o carraca que suena avisando de que la pieza a medir está ya sujeta, lo que impide que las lecturas dependan del grado de apretamiento que el observador haga en cada medida.

Este palmer, fabricado hacia 1970, fue utilizado durante muchos años en los Laboratorios de Física de nuestra Escuela, por ejemplo, para medir el espesor de una lámina metálica. En su cuerpo presenta una placa dorada identificativa con la leyenda export PEL, siendo en la actualidad PEL una marca de la empresa Kalkum Ezquerra, con gran experiencia en la fabricación y distribución de instrumentos de medición, con sede en Haro (La Rioja) y cuyo origen se retrotrae hasta 1850, siendo en 1940 cuando, al transformarse la empresa, fabricaría el primer micrómetro de la marca PEL.

Catalogación, documentación, texto y fotografía: Prof. A. Vitores (2021)