© Arístides Senra Díaz
Es el mantra de muchos emprendedores: convencer a algunos inversores para que inviertan en su proyecto, que será sin duda una start-up excitante que romperá el mercado.
Las noticias no se lo ponen fácil a nuestros emprendedores. Glovo es el segundo unicornio español (después de Cabify y, ¿qué pasa con eDreams?) y dado que la valoración es lo que parece que importa en estos negocios, la conclusión es evidente: para tener éxito hay que conseguir una gran percepción de valor por parte de las prima donnas que manejan alguno
No es tan sencillo. Ni los inversores son prima donnas, ya que trabajan muy duro analizando cientos de proyectos y arriesgando a veces su propio dinero en proyectos de alto riesgo, ni la mayoría de los emprendedores se deja deslumbrar por cantos de sirena de una valoración imposible.
Comenta Jesús de Benito, emprendedor (vendió su empresa a una gran multinacional alemana) y ahora inversor, que los emprendedores deberían dejar de hablar de inversión para trabajar con más foco en la financiación, aquellos recursos que serán necesarios para llevar a buen término el plan de negocio que han diseñado.
No es la idea, es la ejecución
Pero es que muchos emprendedores todavía piensan ingenuamente que tener una gran idea original es el paso que enciende la luz verde para arrancar un negocio. No es cierto. El concepto de la idea en sí mismo no vale nada. Y muchas de las más exitosas start-ups no hacen sino replicar modelos de negocio que ya han demostrado que funcionan, pero que lo hacían de forma ineficiente.
Aún así, muestra respeto, que no temor, a la competencia. De hecho, la existencia de competidores debe ser motivo de celebración. Si encuentras competencia, es la señal inequívoca de que existe un mercado y por tanto, también existe una oportunidad de ofrecer un producto o servicio de valor que ese mercado pueda comprar.
Añade frecuentemente De Benito que una de las facetas más valiosas de cualquier emprendedor es la capacidad de vender; y es algo que los inversores valorarán por encima de todo, la demostración de que no sólo tiene un plan para generar ingresos sino que es capaz de ejecutarlo eficientemente.
Este artículo forma parte del último número de la revista I&E Innovación y Emprendimiento en la UPM. Puedes consultar el número completo y descargarlo a través del siguiente enlace.
