por Celso Candia, Nayibe Garcia, Alan Montañez y Romelys Rivero
Hacer compatible el crecimiento del transporte aéreo con la sostenibilidad del modo ha venido siendo el objetivo del sector en los últimos años, dado que es una de las principales limitaciones al avance de la industria. Es por ello, que la investigación en elementos como la aerodinámica, estructuras, motores o sistemas que aporten a la eficiencia de las aeronaves, por ejemplo, es importante para conseguir este objetivo.
Desde el MUSTA-ATA de la UPM, a través de la asignatura de Sostenibilidad, quisimos darnos a la tarea de investigar sobre que aportes se están dando por parte de la Universidad a este campo y encontramos al Docente José Ygnacio Pastor quien es catedrático de Ciencia e Ingeniería de los Materiales en la Escuela de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos y; actualmente se dedica a la investigación y divulgación sobre la caracterización mecánica y microestructural de materiales en condiciones extremas, es decir, investigan sobre el comportamiento mecánico, tropológico y de reproducción in situ de motores de aviones o de una central nuclear en temperaturas que pueden oscilar entre -200° hasta 1800° en vacío.
En una entrevista realizada al catedrático comenta que aunque sus investigaciones no tiene un foco único en transporte aéreo, un aporte que pueden hacer desde su óptica hacia el sector aeronáutico, puede ser la obtención de materiales para trabajar a más altas temperaturas, mejorando la eficiencia del sector y aclara que aunque se queme la misma cantidad de combustible, se aumenta la eficiencia dado que se obtiene más trabajo del motor por lo tanto, el rendimiento aumenta y se generan menos residuos ambientales.
Otra investigación importante que está realizando éste catedrático, envuelve dos proyectos europeos relacionados con el reactor de fusión internacional que se está construyendo en Francia y su importancia radica en que no tiene emisiones, ni tiene reactivos a largo plazo porque el combustible usado es hidrogeno o litio y la cantidad de energía que puede producir es ilimitada, por tanto sería una alternativa sostenible complementaria a la eólica y a la solar. Sin embargo, la mayor diferencia radica en que estas dos ultimas siempre necesitaran una fuente de respaldo porque dependen de las condiciones ambientales. Estos proyectos, se encuentran dentro de los proyectos ambientales de Europa y que están ligados a otros países como China y EE.UU
Al indagarle sobre cómo ha sido combinar la docencia, la investigación y la innovación, resalta que aunque es difícil lograr unir estás tres dimensiones, para ser un buen docente se debe ser un buen investigador, de lo contrario va a ser difícil transmitir la pasión por saber más, se transmitiría sólo un conocimiento muerto y para eso existen los libros.
La investigación es la chispa que sustenta los países: investigar es mucho más que innovar, recalca.
Es por lo anterior, que también orienta proyectos de algunos estudiantes de posgrados entre los que se encuentra el de Martha Mohedano Sánchez, quien pertenece al Proyecto MINECO Retos jóvenes investigadores de la de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) quien trabaja en la caracterización, corrosión y degradación de materiales de interés tecnológico. Este es un proyecto europeo Clean sky que lleva un año y está relacionado con alternativas no toxicas desde el punto de vista medio ambiental. El objetivo del proyecto es buscar tratamientos superficiales que funcionen para recubrimientos que puedan sustituir al típico recubrimiento de conversión de baño de cromato, dado que es tóxico y se busca una alternativa que no limiten al tratamiento desde el punto de vista ambiental.
También resaltan que están trabajando en estos tratamientos alternativos para la corrosión de aluminio en el que se utilizaban cromatos, pero ante la prohibición del su uso por parte de la UE, se hace necesario que la industria aeronáutica busque alternativas sostenibles para realizar tratamientos de conversión de aluminio a magnesio dado que estás aleaciones ligeras se utilizan frecuentemente en aeronáutica, concretamente en partes del motor de los aviones.
El docente reflexiona sobre el futuro de la investigación e intuye que dentro de 10 años los temas que está investigando van a cambiar radicalmente. Esto sucederá principalmente por el plan de sostenibilidad más verde adoptado en la región. Sin embargo, asegura que el principal aporte se debe hacer a través de microevoluciones empezando en las aulas, siguiendo por los centros, extendiéndose al campus y de ser posible a toda la ciudad que son los ámbitos más cercanos. Hace énfasis en que no se debe esperar a que se tomen decisiones políticas para cambiar.
“Si desde la institución hacemos cambios pequeños a mediano y largo plazo son culturas adaptadas al ámbito institucional que mejorara la calidad de vida, sin necesidad de inversiones. Se deben romper los miedos y las dificultades desaparecerán”.
Finalmente, hace una consideración sobre el papel de los centros educativos y afirma que el espíritu de la universidad no es almacenar conocimiento porque para eso existe Wikipedia y los libros, sin embargo, cambiar y dejar obsoletos a los investigadores actuales está en las manos de los jóvenes y específicamente en lo referente a sostenibilidad, pues concuerda en que es un campo en el que todavía hay un largo camino por recorrer.