Poetas, cuentistas e ilustradores

A collection of Rudyard Kipling's, Just so storiesEs curioso como estos tres gremios, vocaciones, inclinaciones (llamémosle como se quiera) se alimentan y realimentan entre sí. Así que este verano pensé que quizás merecieran una reseña conjunta. Es más, en casos de rara imperfección (de lejos mucho más interesantes que lo contrario) encontramos seres que por extraño que parezca son capaces de exhibir  varias e incluso todas las facetas a la vez (recordemos a Saint-Exupéry).

Rudyard Kipling es otro de mis admirados personajes. Hay varios libros de él que en estas fechas alguien agradecería: Just so stories, es uno de ellos, un librito de cuentos que escribió para sus hijos, que crea y recrea mitos capaces de explicar la evolución de los animales (como el elefante consiguió su trompa…)

De este libro existen muchas versiones, la primera de ellas con las ilustraciones originales de Kipling; en castellano lo encontramos delicadamente editado por Juventud con ilustraciones de Ángel  Domínguez.

Otro de los libros que pienso pueden agradecerse en estas fechas es Carta a un Hijo que presenta en gran formato, delicadamente ilustrado, en versiónbilingüe el poema IF…

Por último, no puedo sustraerme a evocar aquí a un poeta especial que Cubierta de Precisamente así, Rudyard Kiplingsiempre me acompaña: Walt Whitman, de quién encontramos una inspirada edición de su poema  when i heard the learn’dFotogarfía de Loreng Long astronomer, ilustrado por Loreng Long cuya foto aparece junto al mencionado poeta.

Todos estos bellos ejemplares me confortan y son una demostración palmaria de que el disfrute  del libro impreso es claramente una actividad sin riesgo de extinción.

¡Feliz Navidad y Feliz Lectura!

Ilustración de Loreng Long

When I heard the learn’d astronomer;

When the proofs, the figures, were ranged in columns before me;

When I was shown the charts and the diagrams, to add, divide, and measure them;

When I, sitting, heard the astronomer, where he lectured with much applause in the lecture-room,

How soon, unaccountable, I became tired and sick;

Till rising and gliding out, I wander’d off by myself

In the mystical moist night-air, and from time to time,

Look’d up in perfect silence at the stars.

Fotografía de Walt Whitman

Rudyard Kipling en la Biblioteca UPM

El Fantasma del Ingeniero Ejecutado/ Loren R. Graham

Las trabajadoras textiles (1927), Aleksandr Deineka

El fantasma del ingeniero ejecutado

Loren R. Graham

Editorial Crítica, 2001

Visito la recientemente inaugurada exposición de la Juan March: Aleksandr Deineka (1899–1969), una vanguardia para el proletariado (7 de octubre 2011 – 15 enero 2012), y aflora una extraña combinación de deleite estético y opresión anímica. Son estos revulsivos que se quedan ronroneando los que a veces te inspiran, y de repente recordé el libro que incluyo en la reseña.

El texto del catedrático emérito de Historia de la Ciencia del MIT, Loren Graham, intenta explicar por qué fracaso la industrialización soviética. Y lo hace a partir de una labor detectivesca que le exigió décadas de búsqueda de retales, hasta acceder a la biblioteca INION de la Academia de Ciencias Rusa, Cubierta de El fantasma del ingeniero ejecutado, Loren R. Grahamen el año 1991, durante la Perestroika.

El libro es un clásico en castellano de la editorial CRÍTICA que se reeditó conincidiendo con el treinta aniversario de la editorial. Tiene dos partes, en la primera se refiere la historia del Ingeniero Palchinsky (en la fotografía) que fue ejectutado por el régimen stalinista en juicio sumarísimo, junto a otros ingenieros que conformaban entonces el Partido Industrial.

Ellos abogaban por una Ingeniería Humanitaria dedicada a formar Aleksandr Deinekatrabajadores que fueran dueños de su trabajo y no esclavos de él, y deseaban fervientemente proponer un papel en la sociedad que fuera activo, capaz de considerar no sólo el contexto económico sino el social.

Los errores denunciados por aquellos ingenieros en los albores de la industrialización rusa, no sólo no fueron considerados sino que se evaluaron en términos de traición a la revolución. Adiós a la disidencia. Sin disidencia no hay errores declarados, y sin capacidad de detectar el error, rápidamente se transita hacia el abismo.

PalchinUno de los errores denunciados relativos a la formación de los ingenieros en la recientemente creada Unión Soviética hacía referencia a una formación estrecha y truncada, intelectualmente empobrecedora, políticamente tendenciosa, socialmente irrelevante y éticamente inaceptable.

La segunda parte del libro describe tres ejemplos concretos del fracaso de la industrialización soviética: el ferrocarril siberiano, el accidente de Chernobil y la situación de la minería en la cuenca del Don.

Cubierta de The ghost of the executed engineer, Loren R. Graham

Es un texto hermoso y emotivo, clarificador. Y es un recordatorio para todos nosotros tan orgullosos de la tecnología, que ésta no es un fin, sino un medio al servicio de la humanidad.

En estos momentos en que el sistema capitalista también parece tambalearse y asistimos a la reforma de las instituciones de educación superior, quizás merezca la pena repensar la trayectoria y reflexionar en qué medida la ingeniería puede contribuir a mejorar las perspectivas de futuro de la humanidad, lo contrario sería demoledor.

Los pueblos que no conocen su historia están condenados a repetirla

Loren R. Graham en la Biblioteca UPM

Némesis Médica / Ivan Illich

Carátula: Némesis Médica, Ivan IllichIvan Illich

Némesis Médica

Una sociedad que valora la enseñanza planificada por encima del aprendizaje autónomo no puede sino enseñar al ser humano a sujetarse a su lugar mecanizado

Chiste

Encontré un libro entre los que atesoraba mi padre: Némesis Médica, y el nombre del autor, Iván Illich me resultó familiar (es en realidad un personaje de Tolstoi). He aquí que se trató de un error afortunado porque este Iván es un personaje real sin relación aparente con el anterior, aunque si cabe más interesante.

Iván Illich

He escogido algunas frases que considero reflejan la calidad del texto:

La medicalización de la vida no es sino un sólo aspecto del dominio destructor de la industria sobre nuestra sociedad… Las estrategias médicas fracasan porque concentran demasiados esfuerzos en la enfermedad y muy escasos en cambiar el ambiente que enferma a la gente…

Una sociedad  superindustrializada es morbosa en el sentido de que la gente no encaja en ella. Cuanto más tratamiento cree la gente que necesita, menos puede rebelarse contra el crecimiento industrial.

Es una característica de esta sociedad superindustrializada que la gente desee ser enseñada, movida, tratada o guiada en lugar de aprender, curar y encontrar su propio camino.

Ivan Illich elige el término Némesis que refiere a la diosa griega que castigó a Prometeo, codicioso ladrón del fuego, condenándolo a que un buitre le devorara las entrañas durante el día, mientras los dioses cruelmente le curaban durante la noche.

Némesis, en palabras de Ivan Illich, es el monstruo material nacido del sueño industrial desmesurado.Iván Illich

nemesis mito griego

A Ivan Illich Wikipedia lo describe como un pensador austríaco polifacético y polémico, autor de críticas a las instituciones clave del progreso en la cultura moderna, capaz de formular profundas críticas a la educación escolar, y al consumo voraz de la energía necesaria para el desarrollo económico como una negación de la equidad y la justicia social. El Colegio de Estudios de Posgrado de Ciudad de México nos ofrece en Youtube una panorámica personal más interesante.

Quizás su crítica mordaz al exceso de medicalización de la vida sea aún más interesante teniendo en cuenta que fue desahuciado por los médicos al nacer y sin embargo sobrevivió y durante los últimos veinte años de su vida sufrió un proceso cancerígeno de tumores en la cara que, siendo congruente con su crítica a la medicina institucionalizada, se negó a tratar con métodos “profesionales”.

Practicó en cambio técnicas terapeúticas de meditación y yoga y aunque en una fase inicial de diagnóstico le diron una esperanza de vida de apenas algunos meses, llegó a sobrevivir casi veinte años más, y se hizo cargo él mismo de su enfermedad, en una relación de serena y estoica.

Podemos encontrar muchas de sus obras en internet, realmente merece la pena. Cuán incisiva puede ser la visión de un hombre, y cuánto tiempo necesitamos para apreciar sus aspectos más certeros.

Cita de Iván Illich

Ivan Illich en la Biblioteca UPM

El Buda de los suburbios (I felt happy and miserable at the same time), Hanif Kureishi

Hanif Kureishi

El buda de los suburbios

Hanif Kureishi

Anagrama

1994

My name is Karim Amir, and I am an Englishman born and bred, almost.

Así comienza esta novela de tintes autobiográficos que narra la historia de una familia anglo-paquistaní en los suburbios londinenses.

Galardonada con el premio Whitebread a la mejor primera novela en 1990, no cumple ningún estereotipo y resuena con voz propia: a ratos dura, a ratos descorazonadora, y casi siempre agridulce.

Nos introduce en el Londres suburbial de los años 70, donde los chavales se mueven con una autonomía que raya en el abandono, con unos padres trabajadores que se debaten entre amarrarse a sus raíces como único faro guía, o abandonarse al día a día sin esperanza.

Entre todos los personajes destaca el padre que busca denodadamente su particular Tao en un proceso de crecimiento interior que le conduce a través de los sabios orientales: Buda, Lao-Tze, Confucio, Chuang-Tzu, a encrucijadas dolorosas: This whole business of living is very difficult (todo este asunto de vivir es muy complicado).Cubierta de El Buda de los suburbios, Hanif Kureishi

La BBC nos ofrece el Buda de los Suburbios en una serie en 4 capítulos con una banda sonora excepcional de David Bowie: The Buddha of Suburbia.

Kureishi, nacido en 1954 tiene una trayectoria variada y extensa relacionada originalmente con el teatro, su tabla de salvación. En su libro Dreaming and Scheming (2005) plantea su trayectoria en el arte de escribir como un proceso en el que la mente se expresa mediante el esfuerzo creativo, y reúne  algunos de sus pensamientos políticos.

People ask for advice all the time when they should try to be more aware of what is happening

(La gente pide consejo todo el tiempo cuando debería intentar estar más al tanto de lo que está ocurriendo)

Hanif Kureishi en la Biblioteca UPM

Ciencia y Método / Henri Poincaré (la science n’est pas tout)

Henri Poincaré Sobre la ciencia y su método

Henri Poincaré

Cículo de Lectores

Es por la lógica que se demuestra, es por la intuición que se inventa. Saber criticar es bueno, saber crear es mejor. Es por eso que es preciso ver la meta desde lejos, y la facultad que nos enseña a verla es la intuición. No se puede demostrar todo y no se puede definir todo, será siempre necesario pedir prestado a la intuición.

Henri Poincaré es poliédrico, sutil y encantador. Profesor universitario convencido de la importancia de la enseñanza por analogía. La calidad literaria de sus escritos de divulgación científica: Ciencia e hipótesis, Ciencia y método, El valor de la ciencia, Las ciencias y las humanidades, Últimos pensamientos; y su cercana humanidad le hacen a uno perder la noción del tiempo y desear haber estado entre sus contemporáneos.

El libro que menciono en el título de esta reseña lo encontré par hasard en la Feria del libro antiguo y de ocasión este año, en una edición de Espasa-Calpe de 1944 publicada en Buenos Aires, incluyo también una reedición más reciente de Círculo de Lectores que estimo más fácil de localizar. El texto, que te captura desde el primer momento, comienza con una referencia a Tolstoi en su crítica a la ciencia por la ciencia, para posteriormente desgranar su valor y aclarar que lo que llamamos realidad objetiva es, en último análisis, lo que es común para varios seres pensantes y podría ser común para todos.Sobre la ciencia y su método de Henri Poincaré

La Universidad de Nancy, lugar de donde era originario, nos regala el acceso a sus textos en su versión original:

Est-ce seulement parce que la science n’est pas tout, qu’il faut d’abord vivre, et que la culture nous fait découvrir à la fois de nouvelles raisons de vivre et de nouvelles sources de vie? Non, tous sentent confusément que ce n’est pas seulement à l’homme, mais au savant même que les humanités sont utiles.

J’ajouterai que les lettres, bien enseignées, peuvent être une école utile pour l’observateur.

Les poètes, ceux qui sont dignes de ce nom, n’appliquèrent pas leurs épithètes au hasard, ils écrivent après avoir regardé.

Qué hermosa la imagen de un Poincaré ya anciano concentrado en una conversación con Madame Curie.

Henri Poincaré en la Biblioteca UPM

1 17 18 19 20 21