Solo un 2,5% del stock es VPO, el tercer dato más bajo de Europa tras Rumanía y Portugal, según JLL. El valor tasado alcanza por primera vez 1.166 euros/m2
En un panorama europeo donde la vivienda protegida es un pilar fundamental para garantizar el acceso a un hogar digno, España se encuentra rezagada, con cifras alarmantes que evidencian una crisis habitacional latente. Con apenas un 2,5% de su stock de vivienda destinado a protección oficial o vivienda asequible, el país ibérico se sitúa como uno de los que tienen menor oferta de este tipo de viviendas en Europa, sólo por delante de Portugal y Rumanía, y empatado con Bulgaria, según un estudio de JLL.
Históricamente, España ha optado por un modelo centrado en la venta de viviendas protegidas, relegando el alquiler a un segundo plano. Esta estrategia, combinada con leyes del suelo que facilitan la transición de las viviendas al mercado libre, ha contribuido a una escasez crónica de viviendas asequibles en alquiler. Según datos recientes, el 36% de los hogares españoles en alquiler destinan más del 40% de sus ingresos a pagar la renta, una proporción muy por encima de la media europea.
Desde la década de los 60, cuando se impulsó el parque regulado de vivienda protegida, hasta la actualidad, España ha construido apenas 452.000 viviendas protegidas de un total de 5,9 millones. Esta marcada desaceleración en la construcción de viviendas protegidas ha dejado al país en una situación precaria, con una oferta insuficiente para atender las necesidades de la población.
- La vivienda protegida en Europa
- Se producen menos de 10.000 viviendas protegidas al año
- El precio de la vivienda protegida, en máximos
La vivienda protegida en Europa
En el contexto europeo, la disponibilidad de vivienda protegida en alquiler varía considerablemente de un país a otro. Finlandia cuenta con un sólido 13%, seguido de cerca por Suecia con un 19%, y Dinamarca con un impresionante 20,9%. Por otro lado, países como Rumanía y Bulgaria se encuentran en la parte inferior de la tabla, con tan solo un 1,5% y un 2,5% respectivamente de su stock de vivienda destinado a la protección.
Entre los países de Europa occidental, Países Bajos destaca con un notable 30% de su stock de vivienda dedicado a la protección, seguido por Austria con un sólido 24%. En contraste, Luxemburgo presenta un modesto 5,1%, mientras que Bélgica y Alemania muestran cifras más bajas, con un 6,5% y un 3,9% respectivamente.
En Europa Central y del Este, República Checa y Eslovaquia comparten cifras cercanas al 9%, mientras que Hungría se sitúa en un modesto 3%. Eslovenia presenta un 6%, reflejando un compromiso intermedio con la vivienda protegida en alquiler en la región. Estos datos subrayan la diversidad de enfoques y políticas en toda Europa con respecto a la vivienda protegida, destacando la necesidad de acciones coordinadas para abordar las crecientes demandas de acceso asequible a la vivienda en toda la región.
Se producen menos de 10.000 viviendas protegidas al año
Los datos oficiales muestran que la producción de vivienda protegida en España está estancada desde 2013, el año en el que la crisis económica golpeó con más dureza al mercado inmobiliario. En la última década, unas 8.600 viviendas protegidas han obtenido la calificación definitiva de media al año (incluyendo planes estatales y autonómicos), muy por debajo del promedio de los 20 años anteriores (casi 59.000 unidades anuales), según los datos del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana (MIVAU).